Equipo Rojo Nº 1

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Edición original: Read Team Nº 1-7 USA (Dynamite Entertaiment, 2013).
Edición nacional/ España: Planeta Cómic (2015).
Guión: Garth Ennis.
Dibujo: Craig Cermak.
Color: Adriano Lucas.
Formato: Tomo rústica de 184 páginas.
Precio: 16,95€.

 

«[…] hicimos lo que hicimos por una razón: queríamos que hubiera justicia donde no había ninguna.»

¡Vaya zorro está hecho Garth Ennis! Porque hay que reconocer que cuando le pone ganas a la cosa no hay nadie mejor en lo que hace. Por supuesto, habrá a quién no le parezca agradable lo que hace, pero hay pocos guionistas en el medio más astutos y más conscientes del terreno que pisan. La desquiciada mente detrás de Predicador, Hitman o The Boys está muy dotado para esto de los cómics, si necesitáis pruebas frescas echadle un vistazo a Equipo Rojo. Este relato policíaco avalado por Dynamite Entertainment pasa totalmente del «postureo hipster» en el que ha caído parte del cómic estadounidense de los últimos años al intentar clonar el éxito y la señas de indentidad de autores como Matt Fraction, Jonathan Hickman o Jeff Lemire. No es para menos, pues estos han sido capaces de desarrollar un storytelling propio, y darle una vuelta de tuerca a convencionalismos largamente arraigados en los géneros tratados por la viñeta. Pero sus herederos, y en ocasiones ellos mismos, tienden al abuso de la narrativa experimental, a la factura minimalista y al diseño de fábrica, y a presentar personajes siempre a la mode pero poco incisivos y definidos, dejándonos sus obras un regusto a manjar de alta cocina, vistoso y atractivo pero de sabor artificial y algo pobre en carbohidratos. Este problema, para bien o para mal, no se le puede achacar al bueno de Garth Ennis.

En su caso no hay una «imagen de marca» por vender, ni una necesidad o voluntad por redefinir géneros o reconstruir iconos pop para las generaciones del Minecraft, el iPhone y las redes sociales. El nombre de Garth Ennis se suma a un pequeño reducto de autores que resisten al invasor haciendo lo mismo que hacían hace unas décadas, y haciéndolo bien, sin sentir la presión por modernizarse y adaptarse a ninguna corriente. Es una viejo roquero del cómic que sigue dando lecciones a las nuevas hornadas de creadores sobre la manera de contar una historia y hacerlo contra viento y marea, sin pagar peajes a ninguna editorial, sin adscribirse a tendencias oportunistas, manteniendo en todo momento su personalidad y persiguiendo la libertad creativa allí donde se encuentre o esconda. No tiene nada que demostrar, hace lo que le pide el cuerpo y sus trabajos no dejan indiferente a nadie, y no sabemos si menos a sus fieles e incondicionales o a sus detractores. Pero las extraordinarias dosis de violencia de las propuestas de este adalid de lo incorrecto pueden hacer que no veamos el bosque oculto a primera vista, sus verdaderas virtudes y talento. Estas las podemos seguir rastreando en algunos de sus trabajos recientes como Rover Red Charlie y Caliban para Avatar Press, o en la miniserie Where Monsters Dwell ligada a Secret Wars en el que recupera las aventuras del Águila Fantasma en la Primera Guerra Mundial.

Y luego tenemos la presente Equipo Rojo. La historia de un grupo de policías «duros como las putas piedras» parte de una unidad de élite antinarcóticos del Departamento de Policía de Nueva York conocida como Equipo Rojo, formada por los agentes Eddie Mellinger, Trudy Giroux, Duke Wylie y George Winburn. Estos, después de un revés en una de sus investigaciones, cansados de la impunidad con la que es capaz de actuar un reyezuelo del crimen llamado Clinton Days, deciden recurrir a medidas extremas y aplicar su propio y definitivo concepto de la justicia. ¿Qué hubiese pasado si Frank Castle, Punisher, nunca hubiese abandonado la policía? ¿Y si hubiese sido tan ladino como para esconder su rencor y operar al margen de la ley? ¿Y si además hubiese convencido a sus compañeros para sumarse a su cruzada personal? ¿Y si realmente no fuese algo personal? ¿Y si sus acciones fuesen frías y calculadas y solo buscasen mejorar las cosas para la gente de la calle? Todos estos interesantes dilemas éticos y morales aborda, uno detrás de otro, en cascada, Equipo Rojo. Lo hace de una manera tan meditada en su puesta en escena y precisa en lo psicológico, y solo con el apoyo táctico ofrecido por el dibujante Craig Cermak, que asusta pensar en la manera en la que el guionista controla cada uno de los recovecos de esta historia de profundo género negro. Todo ello sin racanear, pero dándole su sentido, a la violencia, el sexo y el lenguaje duro.

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Páginas de Equipo Rojo, Garth Ennis y Craig Cermak

No defraudéis a los dioses de la viñeta, no dejéis pasar este cómic, sobre todo si sois devotos de la religión de este loco irlandés sustentada en la acción, el sinsentido de la vida y las birras. Porque Equipo Rojo representa una buena síntesis de las capacidades de Garth Ennis, lo hace tan fácil que da la sensación que hasta el más tonto podría imitarlo y salir victorioso. Nada más lejos de la realidad. Hay cosas en esta vida que son innatas y no aprendidas, y contar buenas historias está más en la primera categoría que en la segunda. Podemos intuir que el truco está en los personajes, nuestro cuentacuentos particular sabe caracterizar y describir meticulosamente a sus protagonistas, y también a sus secundarios, en una única página, incluso en una viñeta si hace falta, y si bien es cierto que ha creado su personal galería de caracteres prototípicos nunca resultan equivalentes. No es lo mismo su modelo de Nick Furia de Mis Guerras Perdidas, su visión de Frank Castle vista en su etapa con el personaje, el terco reverendo Jesse Custer de Predicador o su despiadado Billy Butcher de The Boys. Todos son tipos áridos como un desierto, vehementes hasta el extremo en sus acciones y circunspectos al encajar sus pérdidas. El elenco principal de Equipo Rojo tiene los mismos ásperos genes, con capas y más capas de humanidad sobre sus hombros, descartando retratos de puro cartón piedra y piruetas narrativas para describir sus vidas.

Porque a Garth Ennis el metalenguaje se la suda, todo lo que no sirva para llevar la historia adelante cae en lo superfluo y gratuito. Nuestro héroe alardea en cambio de ironía, como si de un arma de destrucción masiva se tratase, a un nivel que solo Warren Ellis y unas contadas bestias pardas del medio estarían capacitadas para lograr desactivarla. Este es otro elemento innato en el autor, tanto como el humor negro (tan mal visto en nuestro país), y puede que esto, junto a su morboso gusto por el exceso y la violación de todo lo sagrado, haga que acabemos menospreciando lo que tenemos delante de nosotros. Pero, en el caso de Equipo Rojo, basta con leer el primer capítulo de la serie para sentirse atado a la trama; partiendo de clichés que nos pueden parecer gastados y faltos de originalidad (como si fuésemos a inventar la rueda a estas alturas) Garth Ennis y Craig Cermak logran construir una historia exquisita en su disección de lugares y situaciones comunes. Para nuestro disfrute tenemos ese magnífico sentido del diálogo, más natural que el de Brian Michael Bendis, esa visceral pero razonada manera de acercarse el género negro, y esos fuertes personajes femeninos que pasan de ser un mero atrezo romántico, o cadáveres en la nevera, para lucir una atractiva autonomía y matices contrapuestos a sus homólogos masculinos. Este tema lo resume muy bien en su blog Líneas Cinéticas el compañero Daniel Gavilán.

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Portada y páginas de Equipo Rojo, Garth Ennis y Craig Cermak

En cualquier caso, Equipo Rojo demuestra un interesante retrato sobre las relaciones personales, incluso en la periferia, con personajes secundarios con los que otros autores no perderían su tiempo, convirtiendo la obra en un pequeño gran hallazgo que te obliga a degustar su contenido sin por ello despreciar la comida rápida. El compinche Craig Cermak se encarga de ser fiel al ritmo y el espíritu planteado en el relato con unos lápices que encajan bien con el gusto de su guionista, tan cercano siempre a esos dibujantes que no pierden el tiempo en hacerlo bonito sino en buscar la alternativa más funcional, y narrativamente más sencilla, desterrando cualquier amago de filigrana narrativa de cara a la galería. El directo al grano como única filosofía de vida. Puede que no sea siempre esa la opción visualmente más atractiva, para un medio que se nutre principalmente de ello, y desde luego Craig Cermak está por ahora lejos de los grandes nombres del medio, pero al final se adapta y sobrevive definiendo bien el tono de la historia. Eso a veces tiene mucho más valor que ofuscarse en ser ingeniosos y expeditivos dando cancha a misterios y situaciones que nunca llegan a resolverse. No está en ese juego Garth Ennis, no te ofrece todo masticado, deja cuestiones a tu compresión, pero no hace trampas bajo la mesa, no se anda por las ramas de la aburrida y condescendiente corrección social y política.

Puede que esto parezca un alegato algo exagerado a favor de Garth Ennis, o una pataleta de alguien contra el estado de las cosas, o a saber si simplemente estáis leyendo a un tarado que ha acabado por perder el juicio, pero sea una cosa u otra, o posiblemente todas juntas, eso seguirá sin explicar por qué este guionista sigue estando muy por encima de la media de miembros de su gremio. Por otro lado, leer obras como la presente Equipo Rojo puede poner las cosas en perspectiva y ayudar a valorar en su justa medida el actual panorama del cómic estadounidense. ¿Cuánto hace que no leéis un cómic que no parezca pensado para ser adaptado al cine o la televisión? ¿Hasta qué punto has dejado de disfrutar de las historias por sí mismas y sus personajes para simplemente admirar la enésima y vacía floritura gráfica a doble página que ni siquiera resulta legible aunque finges lo contrario por el que dirán? ¿No estas cansado de cómics que te lanzan a la cara sus grandes e inteligentes ideas y no se atreven a hacer nada con ellas? ¿No echas de menos tiempos más sencillos, cómics más directos y menos pretenciosos? Es cierto, Garth Ennis no es infalible, ha metido la pata hasta el fondo en más de una ocasión, pero cuando está inspirado, y tiene una historia entre ceja y ceja, hace verdadera y satisfactoria justicia poética al cómic. Hablando en serio, haced algo bien en vuestra vida y leed está pequeña jodida maravilla.

  Edición original: Read Team Nº 1-7 USA (Dynamite Entertaiment, 2013). Edición nacional/ España: Planeta Cómic (2015). Guión: Garth Ennis. Dibujo: Craig Cermak. Color: Adriano Lucas. Formato: Tomo rústica de 184 páginas. Precio: 16,95€.   "[...] hicimos lo que hicimos por una razón: queríamos que hubiera justicia donde no había…
Argumento y guion - 9
Apartado gráfico - 7
Interés - 9

8.3

VALORACIÓN GLOBAL

En Equipo Rojo Garth Ennis y Craig Cermak aplican sus propias normas y nos ofrecen un drama policíaco con un exquisito tratamiento de personajes que se mueven por el oscuro lado de la ley divagando alrededor de dilemas éticos y morales, punzantes como pocas veces se ha visto en el género. Para incondicionales del guionista irlandés y para lectores que simplemente buscan una buena historia con la que regalarse, o contaminar, su espíritu.

Vosotros puntuáis: 8.36 ( 5 votos)
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AlbierZot
AlbierZot
Lector
17 julio, 2015 9:55

Vendido. Pocos tan buenos como el Ennis contenido, es decir, la versión berserker del resto de guionistas; y esto parecía ir en esa línea.

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Lector
17 julio, 2015 11:05

pues muchas gracias por tu reseña,jordi.

la verdad es que no conocía la existencia de este comic(y eso que soy muy fán del Ennis),y que lo defiendas de esa manera,me dá buen rollo.

pá la saca¡¡.

Igverni
Lector
En respuesta a  Jordi T. Pardo
17 julio, 2015 12:43

Hola Jordi, de nuevo…

Yo leí el All-star Section 8 nº1 esta semana pasada, que me llegó por fin a la librería, y me llevé una pequeña decepción, la verdad…

Empieza genial, pero al final parece otra obra para reirse de los superheroes DC, y la verdad es que aparte que eso ya lo leí, mismamente en Hitman como bien dices, y no estoy seguro que me apetezca volver otra vez a ese rollo.

De hecho, me sorprende un montón como DC le dió luz verde a esta historia. En Marvel está haciendo «Where monsters…» y hace la historia que quiere con los personajes que le apetecía sin necesidad de parodiar nada. Bueno, nada no, ya que el protagonista ese precisamente eso, una parodia de los «clásicos» héroes tipo Indiana Jones…

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Lector
17 julio, 2015 11:06

¿y cuando se publicará por estos lares su última gamberrada junto al yon mac croy?.

Igverni
Lector
17 julio, 2015 11:09

Pues yo leí los 2 primeros números, y eran cabezas parlantes que hablaban… y hablaban…

Unido a un dibujo que como mucho mucho le daba un aprobado justito.

En resumen, no llegué a leer el nº3

Igverni
Lector
En respuesta a  Jordi T. Pardo
17 julio, 2015 12:26

«Para mí al menos es de lo mejor que llevo leído en lo que vamos de año de lo publicado en España…» WHOA !! Son palabras mayores, vaya!!

A mí el Ennis contenido siempre fue el que más me gusta, así que creo que lo tendré que leer. Igual cuando lo leí en inglés, al no ser lo que esperaba, me echó para atrás, tendré que volverlo a intentar…

Gracias Jordi !!! 🙂

the drummer
the drummer
Lector
En respuesta a  Jordi T. Pardo
17 julio, 2015 23:10

precisamente lo he estado leyendo estos días y, como comentaba en otro sitio, este ‘red team’, aunque dista de estar a la altura de los grandes trabajos de ennis, mantiene un nivel por encima de la media y bien merece una lectura.

también me he estado leyendo el primer volumen de battlefields, ‘las brujas de la noche’, basado en una historia real (la del 588º regimiento de bombardeo nocturno de la unión soviética) y éste si me ha gustado más que el ‘red team’, pero es que casi cualquier tebeo bélico escrito por ennis, que es donde el irlandés se mueve en su salsa, debe ser de lectura obligada ¿lo has leído ya, jordité?

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Lector
En respuesta a  Jordi T. Pardo
19 julio, 2015 11:16

¡ ni se te ocurra dejarlo¡¡. lo digo porque mucha gente la deja de lado casi por su mitad,y esta es una obraza de fuego lento,pero de las que tienen una buenisima resolución. esefinal en el que dices:»vale,joder,ha merecido la pena».
yo empecé a leerla muy decepcionado,y a punto estuve de tirar la toalla con ella,pero el seguir (a pesar de todo) obtuvo su recompensa.

y,tio,tampoco te digo una reseña,pero me gustaria saber tu valoración del trabajo en su totalidad.a ver si logramos más conversos para esta obra de ennis.

frankchalmers
frankchalmers
Lector
18 julio, 2015 19:05

¡Compro! Gracias por la reseña.

Alberthor
Alberthor
Lector
18 julio, 2015 23:30

Otro fiel deboto de la iglesia In Garth we trust. Amén a la reseña, caerá como todo lo que hace este malnacido irlandés. tus disertacione no han hecho más que reafirmar mi intención de compra.

Saludos!

Rafa Reyes
Rafa Reyes
Lector
19 julio, 2015 1:59

Lo compré a ojos cerrados, y la reseña de Jordi no hace más que confirmar mis sospechas.
Lo cierto es que con el Norirlandés tengo la mano abierta de primeras, y aún cuando es una máquina de epatar (que es en más ocasiones de las deseables, en muchas más) me proporciona un gramo de placer que otros ni sobornando a las musas.

Dicho esto, el primer volumen de «Battlefields» del que parlamentais me pareció muy muy muy endeble, de lo peorcito de su producción; a pesar de que se le da muy bien lo bélico, a pesar de que el volúmen viene precedido por grandes críticas, y a pesar de todos los pesares.Lo encontré muy poble desde todos los puntos. Desde luego el dibujo tampoco ayudaba lo más mínimo, y mira que Ennis, lo apuntabais antes, se presta como ninguno al dibujo tosco y guarrete. Pero una cosa es tosco, y otra es tener un garfio donde debería haber una mano. La cosa más gocha que vi en mi vida las viñetas y las caras que perpetra Russ Braun aquí.

Alberthor
Alberthor
Lector
En respuesta a  Rafa Reyes
20 julio, 2015 23:19

disfruté mucho battlefields y deseando leer el siguiente. Cosas de gustos

Rafa Reyes
Rafa Reyes
Lector
En respuesta a  Alberthor
21 julio, 2015 8:43

Así es Alberthor. Lo siento completamente desganado y con el autopilot, cuando lo bélico le apasiona como ninguna otra cosa. Hablo de este volúmen. No sé, cosas de culos.

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Lector
26 julio, 2015 13:05

lo estuve leyendo anoche,y realmente me gustó.
garth ennis es lo suficientemente inteligente para darle una vuelta de tuerca más al tema punisher,y buscar un nuevo enfoque desde un espectro realista..y la mezcla funciona.
entiendo a igverni,y lo sus «cabezas parlantes».el dibujo del dibujante es meramente funcional(siendo generosos),yo hubiese preferido que se ocupase howard chaykin de algo más que las portadas,pero como dice jordi,realmente la historia tampoco parece exigirlo,y aquí tenemos al ennis en «modo narrador»,más que al pirotécnico.
esto vá de debates morales,y aunque hay algunas secuencias del ennis que más nos gusta

Aviso de Spoiler

la secuencia de la masacre de yonkis que perpetra el segundo equipo de tiradores en un piso,dirigidos por ese «sosias» fisico de walter white,y el posterior encuentro entre ambos escuadrones

no es lo prevalente.

y aquí,jordi,tengo que recomendarte de todas,todas,una comedia que me gusta mucho(y que pasó injustamente,sin pena ni gloria por nuestro país,a pesar de contar con un puñado de buenos actores).

LA ÚLTIMA CENA(1996).

http://pics.filmaffinity.com/La_ltima_cena-908462420-large.jpg

cuando la veas,entenderás el sentido de ligarla a este post.
ya contarás. 😉

p.d:
tres cosas.

aún sin haber leido nada del comic original.me atrevo a alabar la traducción española de este comic,que me parece sobresaliente,y absolutamente digerible.mí aplauso más entusiasta a quien la haya realizado,por la parte que me toca como lector.

no sé si garth ennis ha llegado a catar THE WIRE.si no lo ha hecho,el dia que lo haga,le puede acabar explotando la cabeza. 🙂

me sorprendió leer lo de:» este ejemplar cubre del 1 al 7″.
¿entiendo,por tanto,que es serie abierta?.
¿pero hay algo más que contar?.