Capitán América vol.8 89 – El hogar de los valientes 1

 

Edición original: Capitán América vol. 8 #89
Edición nacional/ España: Captain America #695 USA
Guión: Mark Waid
Dibujo: Chris Samnee
Color: Matthew Wilson
Formato: Grapa, 32 págs.
Precio: 2,75€

 

La línea editorial marcada por las grandes productoras de cómic es cíclica, es algo que aquellos que llevamos ya unas décadas leyendo comics observamos con resignación, épocas en las que se buscan conceptos novedosos a los pocos años se ven reemplazadas por un back to the basics que dirían los americanos buscando la esencia de unos héroes llevados a un segundo plano. Por ese motivo tras la época adjetivada como All New donde disfrutamos de joyas como Ms Marvel, Lobezna o Chica Luna toca volver a revisar el Legado de Marvel o más bien de los personajes bandera de esta. Y si hablamos de personajes bandera sin lugar a dudas a todos nos viene a la mente Steve Rogers, el Capitán América.

Venimos de una época soberbia en cuanto a calidad en las aventuras del Capitán América, el origen de esta magnífica etapa lo podemos situar con la llegada de Ed Brubaker quien se sacó de la chistera una etapa en la que mezclaba el heroísmo con la política y la intriga tejiendo uno de los argumentos más ricos por su complejidad. A dicha etapa le siguió la de Rick Remender y John Romita Jr. quienes apostaban por un tono más pulp y de aventuras, una historia cargada de epicidad que nos dejó sin aliento. Tras su conclusión fue el turno de Nick Spencer quien fue cocinando a fuego lento una soberbia historia que rememoraba la soberbia etapa de Steve Englehart en los años setenta y en particular la que sería su epicentro, La saga del imperio secreto. Quince años de grandísimos momentos, de magníficas historias, quizás por ese motivo cuando en Marvel decidieron que había que recuperar su Legado tuvieron que darles muchas vueltas a cómo recuperar ese aire nostálgico en la serie pero sin perder la calidad que había mantenido la serie durante década y media. Y a veces, la respuesta más sencilla es la más acertada, y en este caso eran dos nombres: Mark Waid y Chris Samnee quienes habían vigorizado a Daredevil y La Viuda Negra recientemente.

Antes de que nos emocionemos ante lo mucho que puede aportar este tándem a la leyenda del personaje hay que decir que su etapa viene con una fecha de caducidad muy corta, tan sólo ocho números, los que van del 695 al 702 americano (Samnee de hecho se despide con el número 700) y que en España ha comenzado a publicarse este mismo mes a partir del número 89 de la edición de Panini Cómics. Su número debut no decepciona y ofrece ni más ni menos lo que se espera a nivel tanto de enfoque de la historia como de dibujo demostrando ser ambos uno de los tándem más en forma del panorama actual.

Aunque no me guste la palabra por sus connotaciones negativas diría que su apuesta es previsible aunque efectiva, es decir, nos ofrecen un capítulo debut cargado de sentimiento en el que ahonda en lo que proyecta el Capitán América como héroe hacia los ciudadanos, y para ello se amparan en un historia que tiene su origen tras su primer regreso después de su hibernación en hielo, en una aventura que le llevó al pueblo de Burlington en Nebraska donde un peligroso grupo de villanos organizados con tintes supremacistas de nombre Baluarte intentó iniciar una escalada de odio y violencia atacando a ciudadanos a pie de calle, por suerte, allí estaba Steve para salvarles y poner entre rejas a los desalmados. La amenaza no cumple como villano de entidad pero sí para mostrarnos los sentimientos que es capaz de generar el héroe ante aquellos a que defiende, frases solemnes como: “Tienes que proteger a Jacob. […] Porque es más pequeño que tu.” Nos acompañan hasta el final de esta primera entrega en la que cobra una nueva dimensión y forman parte de la inspiración que transmiten sus acciones. Esta acción que está anclada en el pasado del héroe rápidamente da paso a nuestros días en los que vuelve a visitar de nuevo dicho pueblo justo el día en que se homenajea el día que les salvó de Baluarte, ¿casualidad? Para nada, hay un porqué y de nuevo una lección de cómo su figura inspira a la gente en diferentes formas pero siempre para hacerlos mejores. A estas alturas tanto Waid como Samnee nos tienen ganados y demuestran que se les da como a pocos este tipo de historias de plena actualidad pero en las que saben como pocos llegar hasta la materia prima que define al héroe del cual están narrando sus aventuras.

Waid y Samnee lo han vuelto a hacer, resulta casi insultante la facilidad con lo que nos ofrecen a los lectores ni más ni menos que aquellos que estamos esperando, lastima que como os decía anteriormente esta etapa vaya a ser tan breve, con todo ahí estaremos para leerla y disfrutarla mes y a mes.