Titanes: La Chispa

 

Edición original: Titans Special núm. 1 USA (one-shot), Titans núms. 23-27 USA.
Edición nacional/ España: ECC Ediciones.
Guión: Dan Abnett.
Dibujo: Ben Oliver, Brent Peeples, Brian Ching, Denis Medri, Guillem March, Matt Santorelli, Max Raynor, Nicola Scott, Sergio Dávila, Vicente Cifuentes.
Entintado: Brandon Peterson, Matt Santorelli.
Color: Ivan Plascencia, Hi-Fi Design.
Formato: Rústica, 168 páginas.
Precio: 15,95 €

 

No están siendo los Titanes una de las mejores series de la etapa Renacimiento, ni tampoco ha sido ese resurgir clásico que todos esperábamos, con la formación del equipo que vimos en la estupenda La Cacería de los Titanes, con Arsenal, Donna Troy, Nightwing, Aqualad, Omen y el esperadísimo Wally West. Lo dicho, empezó genial con esa cacería, y con un primer arco bastante aceptable, y empezó a renquear a partir del segundo, manteniéndose más o menos con cierto interés en el crossover El Contrato de Lázaro, para después hundirse poco a poco tanto en calidad como en ventas. No se puede decir no obstante que DC no ha apostado por ellos, incluyéndolos en diferentes crossovers, que insisto no han estado nada mal, y manteniendo un equipo creativo regular, con Dan Abnett y Brett Booth (hasta el número 18).

Pese a todo, parece que no ha conseguido cuajar entre los lectores, y por ello, y tras todos los sucesos ocurridos en Metal y Sin Justicia, que han puesto el universo DC una vez más patas arriba, los editores y Abnett han aprovechado la coyuntura para darle un cambio de aires a una colección que no estaba funcionando, cambiando gran parte de los miembros del equipo. Así pues, con esta nueva premisa nos encaminamos hacia la nueva etapa de los Titanes, que comienza con el tomo editado por ECC Ediciones, Titanes: La Chispa, y que hoy os traemos aquí para contaros qué tal le ha sentado a este equipo el nuevo rumbo. No obstante, ya os adelanto que parece que ha sido peor el remedio que la enfermedad.

Después de los eventos de Metal, nuestros héroes rompieron el Muro de la Fuente, que dio origen a un montón de consecuencias inesperadas para el mundo, algunas de las cuáles se contaron en Sin Justicia, otro punto y aparte para el universo DC, que dejaba a sus principales personajes en situaciones diferentes para investigar los árboles de energía que se conectan con los Titanes Omega y su terrible poder. Así pues, se forman tres equipos distintos, tres ligas, siendo la principal de ellas, la Liga de la Justicia de toda la vida, liderada por Detective Marciano. Un Marciano que introducirá muchos cambios, siendo uno de ellos la formación de unos nuevos Titanes con la colaboración de su líder, Nightwing, que elegirá a los nuevos miembros. Todo esto se narra en el número especial, que sirve de alguna forma como nuevo punto de partida para este grupo de héroes.

Así pues, tras todo lo sucedido en Héroes en Crisis, los Titanes se quedan solo con Nightwing y Donna Troy como miembros originales, a los cuales se unen Acero, Raven, Beast Boy y Miss Marciana, que servirá como enlace con J’onn de lo que ocurre, estando así de alguna forma controlados por él, algo que no gustará especialmente a Dick, y que será motivo de discusiones constantes con M’gann, siendo uno de los temas principales de estos primeros números de esta nueva etapa. Una relación sin embargo interesante la que se establece entre estos dos personajes, que pone de manifiesto el ego y los complejos de Dick, y termina siendo además, lo mejor de estos números, puesto que lo demás no es más que un desfile de monstruos fantásticos sin ningún sentido contra los que Acero y Beast Boy se puedan dar un festín de mamporros, para deleite de los lectores, pero que no aporta absolutamente nada.

Se introduce un villano, que empieza a hacer de las suyas en estos números, pero del que todavía parece que estamos muy lejos de ver qué plan tiene, tanto él como el propio Dan Abnett, para la historia de un equipo que, una vez más, se ve lastrada por sucesos de eventos y otras series, y que tras el número 27 entendemos que será diferente. No es excusa no obstante para poder montar una trama verdaderamente interesante y original que haga disfrutar a los lectores y desarrollen a estos personajes de forma tanto individual como colectiva. Y sí, hay un cliffhanger al final del número 27, y un secreto importante que puede dar cierto juego en el grupo, pero ni aún con ello Abnett consigue reengancharme a los Titanes y hacerme desear leer lo que viene a continuación.

En el apartado artístico tenemos a Brent Peeples y Brandon Peterson al dibujo, Hi-Fi e Ivan Plascencia al color, así como una larga lista de artistas que participan en el número especial, entre los que destacan el patrio Guillem March. Peeples ha trabajado recientemente en DC en algunos números de New Super-man, mientras que Peterson es un veterano y solvente dibujante que se había prodigado más por la competencia, pero que desde hace unos años ha empezado a trabajar también para DC en esta serie o en algunas del universo Green Lantern. Y francamente, existe una gran diferencia entre ambos artistas, siendo Peterson mucho más agradable a la vista digamos, y Peeples muestra más carencias en sus diseños, faltos de matices y detalles que hacen parecer dibujos inacabados. No es el caso de Peterson, insisto, que nos regala buenos momentos de acción, destacando especialmente en el número 25, con escenas muy diferentes en las que los personajes expresan emociones y tienen conductas distintas entre sí, bien narradas e ilustradas por Peterson. Lástima que su colaboración se acabe aquí, y en los siguientes números volveremos a tener un nuevo baile de artistas sin ton ni son hasta llegar a Bruno Redondo, que es quien dibuja actualmente la colección, y que esperemos que se quede mucho tiempo.