
A la caza del Joker
So, I died… Died… What a nice way of saying I was murdered!
El pasado 3 de agosto DC publicó el primer número de una miniserie de tres sobre el Escuadrón Suicida aprovechado el estreno mundial de la nueva película. Es uno de los grupos de moda de DC, con Harley Quinn como gran estrella y eso supone que la editorial aprovecha el tirón comercial para editar y reeditar todo lo que tiene a tiro. En este caso, tenemos la fortuna de que han formado un equipo creativo con dos autores top como son Brian Azzarello y Alex Maalev, que han planteado una premisa interesante y se han encontrado además con la libertad que da que se publique bajo el sello Black Label.
La historia empieza con Jason Todd en la cárcel que nos hace un repaso de su vida como Robin, su muerte, resurrección, caída y del día a día como presidiario. Recibe entonces la visita de Amanda Waller, ésta le ofrece liderar una misión de Task Force X. Cazar al Joker. Jason acepta antes de conocer a sus compañeros. Serán Firefly, Silver Banshee, Pebbles, Meow Meow, Plastique, Wild Dog, Yonder Man y la inevitable Harley Quinn.
Azzarello escribe una historia con un claro sabor noir desde la narración en primera persona de Jason hasta los diálogos cortantes y afilados. Al publicarse en Black Label en formato prestigio, los autores disponen de más espacio para desarrollar la trama por lo que pueden permitirse más tiempo y adoptar diferentes ritmos en la historia y no caer en el frenesí hiperdenso al que a veces obliga el formato de 24 páginas.
El guionista de Cleveland puede enlentecer la historia cuando quiere centrarse en Todd y apretar el acelerador en las escenas de acción. A lo largo de las páginas tendremos giros repentinos, cameos, detalles que dan belleza al guion de Azzarello (ese gato robot oxidado por la lluvia), guiños a los comics precedentes e históricos (como el controvertido Muerte en el familia) y un homenaje al clásico de la ultraviolencia (nada casual) La Naranja Mecánica.
La miniserie ha recibido una clasificación R por lo que tendremos toda la violencia explícita que permiten esta categoría y la capacidad del dibujante. Hablando de Alex Maleev, nos ofrece una muestra del buen momento que está viviendo en DC. Sus lápices (digitales parece) se integran perfectamente en el guion de Azzarello y le permiten desplegar sus mejores cualidades, como son una narrativa ajustada, concreta, precisa y sintética rendida a la historia sin pretensiones ni menospreciar su trazo bello, seco, sencillo y urbano. Es el tipo de historia en el que la luminosidad de los trajes de los villanos contrasta con el asfalto y el hormigón de Gotham.
El trabajo de ambos autores encaja a la perfección. Cada uno desde su faceta potencia el trabajo del otro. Los personajes están tan bien escritos como dibujados, de la misma manera que los distinguimos físicamente los diálogos que les escribe Azzarello están adaptados a sus características y son diferenciadores. No es un detalle pequeño, hay autores que tienen un estilo tan característico de escribir que casi todos sus personajes hablan de la misma manera y al final tienes la sensación de estar leyendo al autor hablando en boca de Superman, Batman o Jimmy Olsen.
En conclusión tenemos aquí un cómic muy recomendable en el que dos autores solventes que nos han ofrecido grandes momentos, muestran su oficio y sus ganas de divertirse y divertirnos. Se va a hacer larga la espera hasta el siguiente número.
Lo mejor
• El guion de Azzarello que aúna sus mejores cualidades ante el noir con el género de superhéroes (supervillanos en este caso).
• El dibujo de Maleev el contraste de su frialdad y rigor con personajes como el Joker y Harley Quinn.
• Para este tipo de historias queríamos Black Label.
Lo peor
• Se hace corto.
Román de Muelas
Black Label
Guión - 9
Dibujo - 9
Interés - 9
9
Número de salida que no adolece de introducciones pesadas y redundantes. Va de cara a barraca y se acelera hasta un final en todo lo alto.
Muy buena reseña, excelente primer número este, no soy muy fanático de Azzarello pero aquí escribe una gran historia y de los mejores dibujos de Maleev que he visto y quedan genial con el color de Hollingsworth, estos cómics de Black Label si que dan gusto de leer.
¿»Enlentecer»?
Mucho me temo que esa palabra ni existe. Supongo que querías decir ralentizar. Supongo. Pero a saber. Ay…
Si existe. Busca en la RAE.
Recién leído, muy bueno, muy divertido!!! E ideal tanto para el iniciado como para el que entra por la peli sin saber nada del Escuadrón o Jason. El Azzarello más gore (otro Guasón enfermo para él), enorme dibujo. Y me gusta que remite a Muerte en la Familia no solo en lo de Jason, sino también en el Guasón trabajando para otra nación. Lo único que no me gustó fue Waller, se que no es novedad de este comic, pero esta Amanda no intimida a nadie…que vuelva «la pared».
Y me recuerda a una discusión que se dio hace unos días, yo creo que es una muestra más de que DC está en un gran momento. Seguro me dirán «si, son 4 o 5 grandes titulos, pero con 10 regulares y 30 malos». Puede ser, pero no ha sido siempre así? incluso en el momento de gloria de fines de ´80. En cambio, creo que hubo momentos (mediados de ´90, los N52) en que con suerte se salvaba uno o dos títulos. Hoy tenés titulazos (todos los de King, Morrison, Taylor, este, del año pasado Jimmy Olsen), y del resto hay muchos que zafan o entretienen al menos. Para mi, es mucho decir.
«los diálogos que les escribe Azzarello están adaptados a sus características y son diferenciadores.»
Y tres narices, si los diálogos que le pusieron por ejemplo a Silver Banshee no pegan ni con cola con el personaje.
Aparte de que no me creo ni a punta de pistola que Waller caiga tan redonda en una trampa tan burda como la del final. Quiero creer que solo ha sido una actriz o doble y que esto se trate de una de las habituales artimañas de Amanda, porque La Pared ni de broma debería ser tan sencilla de sacar de juego solo por seguir inflando las ya exageradas credenciales del Joker.