Las aventuras de Blake y Mortimer 26 El Último Faraón

Edición original: Blake et Mortimer HS3. Le Dernier Pharaon FRA, Blake et Mortimer
Edición nacional/ España:Norma Editorial
Guión:Francois Schuiten, Jaco Van Dormael y Thomas Gunzig
Dibujo:Francois Schuiten
Color:Laurent Durieux
Formato:Cartoné, 92 Páginas
Precio:22€

¿Crees qué todavía seré capaz de embarcarme en esta clase de aventuras?

El último Faraón es la versión de Francois Schuiten de Las aventuras de Blake y Mortimer, una de las series más míticas de la BD. Algo que es una gran noticia ya que es bueno ver a estos personajes ilustrados por uno de los mejores dibujantes que ha dado el medio. Sin embargo, la noticia tiene su cara amarga ya que es el último trabajo que va a realizar dentro del cómic. Perder a un autor de esa categoría es una desgracia que debería llevar a la reflexión a las editoriales francófonas, que cada vez van precarizando las condiciones de los autores y son los verdaderos protagonistas del medio. Parece que el equilibrio que siempre ha existido en ese mercado entre autor e industria se va decantando cada vez más hacia la industria, algo que va a empobrecer el medio a pasos agigantados. Para su despedida, Schuiten ha contado con la ayuda en los guiones del cineasta Jaco Van Dormael y del novelista Thomas Gunzig, del color se ha encargado Laurent Durieux. La edición española corre a cargo de Norma Editorial.

Francois Schuiten (Bruselas, 1956) es uno de los mejores dibujantes que ha dado el medio en los últimos cuarenta años. Sus primeros trabajos son la serie Las Tierras Huecas con guiones de su hermano Luc además de Cymbiola y Rail ambas con guiones de Claude Renard. Desde 1983 es el responsable junto a Benoit Peeters de la creación de una de las mejores series de la historia: Las ciudades oscuras. Hasta la fecha se compone de las siguientes historias: Las murallas de Samaris, La fiebre de Urbicande, La torre, La ruta de Armilia, Brüsel, La chica inclinada, La sombra de un hombre, La Frontera invisible, La teoría del grano de arena y Recuerdos del eterno presente. Juntos también ha creado la serie de dos álbumes Volver a París. En el año 2012 publico La doce su única obra como autor completo. Además de en el cómic hemos podido ver su trabajo en otros medios como la ilustración, el cine, el teatro o la televisión.

Jaco Van Dormael es un escritor, guionista y director de cine belga nacido en 1957. Ha dirigido las siguientes películas Toto, el héroe, El octavo día, Mr. Nobody y El nuevo Nuevo Testamento. Esta ultima la coescribió junto a Thomas Gunzig, un novelista y guionista belga nacido en 1970. Para ambos El último faraón ha sido su debut en el cómic.

Años después de despertarse junto a Blake en la Gran Pirámide, Mortimer está en el Palacio de Justicia de Bruselas visitando a su amigo Henri. Le ha llamado porque los niveles de una extraña radiación que emanan del sótano son enormes. Accidentalmente mientras investigan sus causas dejan escapar esa radicación, que provoca una avería masiva en los sistemas eléctricos, Mortimer consigue huir por los pelos. Ante la imposibilidad de evitar que la radiación siga saliendo el ejercito opta por sellar el Palacio de Justicia en una jaula de Faraday para contenerla dentro, pero sique afectando a la ciudad. Así que deciden abandonarla y clausurarla. Años después, vemos al coronel Blake contactar con anciano Mortimer, que fue obligado a jubilarse tras el accidente en Bruselas. El motivo es que la redacción está escapando de la jaula y amenaza con extenderse por el mundo, Blake piensa que el plan del ejército para contenerla es una amenazada aún mayor, así que contacta con su amigo para que trate de solucionarlo.

El último faraón es un álbum al margen de la continuidad de la serie. La trama es una continuación de El misterio de la Gran Pirámide, la saga de dos álbumes que realizo Edgar P. Jacobs y que apareció serializada entre el 23 de marzo de 1950 y el 28 de mayo 1952 en Le Journal de Tintin, aunque no es necesario haberla leído para disfrutar del álbum. Es una aventura crepuscular en la que los protagonistas ya son mayores, pero deben seguir salvando al mundo. Es una historia en la que se amalgaman la serie clásica de Jacobs, la idea de situar la acción el Palacio de justicia de Bruselas estaba entre sus notas para futuros álbumes de la serie, con el universo que durante años ha desarrollado Schuiten, solo o en compañía de Peeters. Los dos universos mezclan a la perfección y permiten que a pesar de ser un trabajo con unos personajes que no son suyos la mano de Schuiten esté presente en cada página. El protagonismo del álbum recae en Mortimer, ya que Blake es un secundario más, pero ambos parecen escritos por el propio Jacobs. Todo esto le otorga una originalidad a la trama, una personalidad propia y un respeto por la obra original de la que carecen otras revisiones de autores actuales a grandes clásicos de la BD.

Argumentalmente la trama tiene algunos de los elementos que caracterizan a Las ciudades oscuras, mezclados con la fantaciencia un tanto naif de Jacobs, como una amenaza es de origen desconocido que tampoco encaja en ninguna explicación científica conocida. Ese mismo peligro va a cambiar de manera absoluta la ciudad. El protagonista emprende un viaje, pero en este caso al ser Mortimer un héroe no es un viaje de huida, sino que su objetivo es salvar el mundo. También vemos una mujer que le sirve de guía, pero Mortimer no se encuentra tan desubicado y superado por los acontecimientos como los protagonistas de la serie de Peeters y Schuiten. De la misma manera el álbum sirve para reflejar muchos de los problemas a los que nos enfrentamos como sociedad como la crisis medioambiental a la que los gobiernos no saben, o quieren, responder, los grupos antisistema encarnados en los habitantes de Bruselas.

El álbum tiene mucho de homenaje a la obra de Jacobs, un auto vital en el trabajo de Schuiten pero también aprovecha la ocasión para hacerse un más que merecido auto homenaje, ya que por sus páginas vemos La Doce, el desarrollo del grueso de la trama en Bruselas nos recuerda a Brüssel y algunos guiños más que no se pueden contar sin destripar la trama.

A estas alturas hablar de la excelencia gráfica de todos los trabajos de Schuiten, casi está de más. Su capacidad para dibujar e imaginar ciudades está por encima de la de cualquier autor de cómics. En esta ocasión decide dibujar y homenajear su ciudad natal, mostrándonosla en su esplendor y años después abandonada y siendo reclamada poco a poco por la naturaleza. Pero también demuestra su capacidad para dibujar desde plantas a animales y cualquier cosa que necesite para contar la historia. Todo ello con una gran atención al detalle que hace que todo sea verosímil. Además, consigue que Blake y Mortimer resulten tan reconocibles como si los dibujara Jacobs. La composición de página es más clásica que las que suele emplear, cada una de las páginas está dividida en dos como se solida hacer en la época en la que aparecieron las primeras aventuras de los personajes. El color de Durieux es fantástico potenciando el dibujo, pero sin descuidar su función narrativa, algo muy poco habitual en el mercado francófono. Es una pena que este álbum sea la despedida de Schuiten, pero puestos a irse mejor hacerlo con el nivelazo brutal que demuestra en estas páginas.

Muy buena edición de Norma como suele ser habitual en ellos. Ahora toca que sigan reeditando los álbumes que les faltan de Las ciudades oscuras, para que la marcha de Schuiten no sea tan dura.

En El último faraón se combinan lo mejor del universo de Jacobs con lo mejor del de Schuiten y el resultado no puede ser mejor. Una obra que respeta el legado de la serie clásica, pero que prueba que es posible crear nuevas aventuras de los personajes que sean tan originales y estimulantes como las de su creador. Un maravilloso punto final a una carrera que nos ha dado algunos de los mejores momentos del cómic. Leyendolo su trabajos viajabamos por Samaris, Urbicande, Armilia o Brüsel mientras buscábamos a la chica inclinada y la sombra de un hombre en la torre de la frontera invisible.

Podéis ver un tráiler del álbum aquí: