Usagi Yojimbo: Yokai

 

Edición original: Dark Horse Comics – 2009
Edición España: Planeta DeAgostini Comics – abril 2014
Guión: Stan Sakai
Dibujo: Stan Sakai
Entintado: Stan Sakai
Color: Stan Sakai
Portada: Stan Sakai
Precio: 9,95 euros (novela gráfica de setenta y dos páginas a todo color)

 

Cuando Usagi Yojimbo cumplió veinticinco años, Dark Horse y Stan Sakai decidieron conmemorar el cuarto de siglo de existencia del personaje con un regalo muy especial para sus seguidores. Fruto de esta decisión es esta novela gráfica que llega a España justo para celebrar el trigésimo aniversario del conejo guardaespaldas. Yokai es una aventura independiente en la que la afición puede encontrar todos aquellos elementos inherentes a la serie regular del samurái sin señor y las personas recién llegadas pueden echarle un tiento para conocer al protagonista.

Lo primero que debe tener en cuenta cualquiera que conozca ya las aventuras de Miyamoto Usagi es que Yokai vendría a ser una versión extendida de una de las historias que Sakai cuenta en un único número. La serie regular del personaje combina arcos argumentales de varios capítulos de duración (que suelen intitular los tomos recopilatorios que son los que conforman la edición española) con historias cortas. Dentro de las mismas podemos encontrar relatos que bien podrían englobarse en todo tipo de géneros: suspense, misterio, acción, comedia, tragedia, terror, policiaco… En esta ocasión, el formato elegido determinó, por su extensión, la necesidad de optar por uno solo de ellos, tocándole la suerte al horror fantástico. Yokai es una palabra japonesa que engloba a toda suerte de apariciones y demás entes propios de los fenómenos para-anormales, siendo su elección para el título de la novela totalmente lógica. Usagi vivirá un nuevo encuentro con seres demoníacos, pero como una de las fortalezas de la serie es la creciente colección de secundarios, no sería ésta una historia completa si don Stan no aprovechara la ocasión para sacar a alguno de los mismos y contarnos algo más sobre él. En esta ocasión el elegido fue uno de los aliados más misteriosos del protagonista: Sasuke, el exterminador de demonios.

Sasuke ha sido una presencia casi constante en las últimas aventuras paranormales de Usagi. Su aparición indica que nuestro amigo orejudo se ha visto metido de lleno en un asunto que escapa a sus habilidades, y en el que el cazador de entes demoníacos parece conocer todos los detalles… aunque los guarde para sí. En esta ocasión, las circunstancias de su nuevo encuentro con su viejo aliado forzarán la revelación de nuevos y sorprendentes detalles sobre su pasado y sus motivaciones. La historia comienza cuando el espadachín vagabundo de las orejas grandes se ve alcanzado por una noche particularmente oscura. Sin cobijo a la vista, su búsqueda de cobijo para descansar hasta la alborada le llevará a un encuentro con diversas criaturas del más allá. Algunas son viejas conocidas del personaje y de los lectores, pero otras aparecen por primera vez en el Japón moderno imaginado por Sakai. La situación se complica para Usagi cuando encuentra a una dama que le ruega rescatar a su hija, que ha sido apresada por los demonios. El posterior encuentro con Sasuke revela al protagonista la causa de la presencia de tanta aparición, la cual no es otra que un intento de invadir el mundo de los vivos. Cazador y guardaespaldas tendrán que unir fuerzas una vez más para detener la conspiración.

Esta novela gráfica permite comprobar una vez más el cuidado que don Stan emplea con su personaje más popular. En los tomos recopilatorios de la serie regular el caballero explica que cada historia conlleva un proceso de documentación y consulta, sin que Yokai haya sido la excepción. Los monstruos del folclore y la mitología nipones son, como se ha dicho, viejos conocidos de la colección, pero en esta ocasión maese Sakai echó el resto y metió en danza a unos cuantos bichos inéditos, adaptándolos en algunos casos a la idiosincrasia de su obra. En los textos que acompañan a la publicación el autor confiesa su querencia por el dibujo de monstruos, y hay que comentar que su revelación queda ampliamente ratificada en esta novela gráfica. Si se abre bien el ojo un lector con ganas de “buscar a Wally” podrá encontrar algún invitado “occidental” a la fiesta de los espíritus del país del sol naciente.

En el apartado gráfico es menester destacar el hecho de que Sakai añadiera el color a su faceta de autor ya de por sí completo. No hay que olvidar que el buen señor escribe, dibuja, entinta y rotula, no siendo el uso de la paleta algo raro entre sus habilidades. Las portadas de los tomos recopilatorios, primorosamente pintadas, ya nos habían dado un ejemplo de lo que, con tiempo y paciencia, podía conseguir el autor. El resultado es una auténtica maravilla que deja a la afición con el deseo de ver más historias de Usagi a todo color.

El resultado final que ofrece Yokai es una pequeña joya que deleitará a lectores veteranos y que quizá resulte un poco simple como carta de presentación para las nuevas generaciones, pero para éstas sólo queda la recomendación de que piensen en ella como un prólogo a una gran historia que lleva tres décadas sin parar de crecer en cantidad y calidad.

Ficha de la novela gráfica en la página de Dark Horse Comics