Nos metemos de lleno en el mes de septiembre arrancando un nuevo curso de Zona Negativa, no sin antes hacer retrospectiva con algunas de las lecturas más interesantes del pasado mes de agosto. No siempre es posible encontrar hueco para reseñarlo todo, y para que muchas de esas lecturas no caigan en el olvido -a nivel individual, que algunas ya han sido reseñadas antes por otros compañeros- estos son algunos de los cómics que disfrutamos durante el pasado mes:

Valoración por Daniel Gavilán
Si con el anterior tomo Dennis Hopeless ya había dejado claro que había encontrado al aliado perfecto en los lustrosos lápices de Javier Rodríguez para elevar la serie de Jessica Drew como la Alias de la presente década, en su nueva entrega van un paso más lejos brindándonos la más descacharrante y genial odisea del embarazo que se haya escrito en un cómic de superhéroes. Con documentación de primera mano al haber sido padres recientemente con sus respectivas parejas, guionista y dibujante sacan lo mejor de su efervescenten ingenido en esta Jungla de Cristal Premama, en la que tras relatarnos con pelos y señales todas las adversidades cotidianas a las que se ha visto obligada a hacer frente con su estado, la embarazadísima Spider Woman se ve atrapada en una situación de rehenes a vida o muerte en un hospital alienígena para asistencia al parto. Hopeless sigue demostrando que es lo mejor que le ha pasado a Jessica desde los tiempos de Claremont, y la cantidad de páginas de Rodriguez dignas de enmarcar se salen de la escala en un desbordante espectáculo visual repleto de humor, un impecable tratamiento de personajes y la mejor acción que vais a encontrar en todo el mes. Ni John McClane se las ha visto nunca en una situación tan @#$%& como Spider Woman aquí.


Valoración por Daniel Gavilán
Hay tres factores condicionantes que pueden pesar mucho a la hora de abordar la nueva etapa de Daredevil. El primero, venir tras la andadura de Mark Waid y Chris Samnee, con toda la presión que esto supone. Si esto añadimos un segundo como haber roto con el tono de su predecesor, Charles Soule se ha metido en un berenjenal en el que habría que ser Frank Miller para salir bien parado. El guionista lo intenta, pero el resultado de este primer tomo de presentación está más cerca de la etapa de Ann Nocenti y John Romita Jr que la del creador de Sin City. Algo que desde luego no es malo, pero que quizás no sea suficiente para los asiduos para los que cualquier cosa por debajo de la etapa Marvel Big Shots les sepa a poco. Aun con todo. Aun con todo, si dejamos de lado las comparativas encontramos una presentación con entidad propia, que destaca por la seriedad con la que se toma el marco legal, la caracterización de su protagonista y como aborda temas tan serios como la inmigración ilegal. No es la etapa que pedíamos y ciertos detalles en torno al cambio de estatus del personaje pueden resultar incómodos para los veteranos. Pero si te aproximas a ella con la mente abierta, echas de menos la elegante tosquedad urbana de Miller y Bendis o directamente acabas de interesarte por el personaje a raíz de la serie de Netflix, nos ofrece un arranque sólido, bien escrito y maravillosamente dibujado entre Ron Garney y Goran Sudzuka.


Valoración por Daniel Gavilán
Publicado entre los números 6 y 11 de la grapa española de Relatos Salvajes, Mike del Mundo se alía con Sam Humphries para ofrecernos una historia completamente diferente dentro de este marco de fantasía en el que todo puede suceder. El viaje en avión de una joven estadounidense rumbo a su tierra natal en México se convierte en la excusa para un nuevo festival de imaginación, criaturas imposibles y bárbaros irreductibles a medio camino entre El Mago de Oz, Dentro del Laberinto, Mundodisco y Hora de Aventuras. El tono no es tan brutal como el de la anterior saga, pero ganamos en humanidad con un Humphries que se entona para ofrecernos el mejor trabajo que haya realizado en Marvel, y donde la única falla es que termine demasiado pronto. Con Arkón, Morgana, Jim Scully y la Reina del Pantano entre los personajes que mantienen la familiaridad respecto al arco anterior, Becka la Escudera y Goletta la Matamagos sin duda han sabido forjar su leyenda en una de las series más frescas y creativas de la Marvel actual.


Valoración por Daniel Gavilán
Si bien no tiene un ritmo tan alocado como el anterior tomo al estar prácticamente todo centrado en un único arco argumental, las virtudes de una de las series más desquiciadamente divertidas del panorama actual siguen intactas, con Doreen poniendo patas arriba todo lo que sabíamos y nunca nos atrevimos a preguntar sobre los viajes en el tiempo. Robots nazis con programaciones obsoletas, madres dispuestas a dejarte en evidencia, secuencias ochenteras de bricolaje, planes de estudios, enemigos venidos del pasado, paradojas espaciotemporales, mucha Wikipedia y Mary erigiéndose como la mayor némesis a la que la Chica Ardilla, continúa ofreciéndonos una serie con identidad única que sabe combinar con sumo ingenio el humor con el heroísmo Marvel. Para pequeños y grandes, especialmente para todo el que esté disfrutando de la actual edad de oro de Cartoon Network.


Valoración por Daniel Gavilán
A pesar de que a Ennis todavía le quedaba trecho para llegar al refinamiento que alcanzaría con las historias de terror bélico con Punisher MAX, su Soldado Desconocido no solo es un absorbente relato sobre los fantasmas de las guerras del siglo XXI, sino también como anticipo y obra fundamental para entender al Ennis que estaba por llegar. Pudiendo encuadrarse perfectamente en el mismo universo que sus trabajos con Nick Furia o Frank Castle, incluso aun con el turbio dibujo de Kilian Plunkett y cierto tufillo a thriller conspirativo de Kevin Costner en los ochenta y noventa, el guionista sabe darle la vuelta a los clichés para situarse muy por encima de la media. En otras palabras, si cambiásemos los aliens por las tramas ligadas a los conflictos bélicos del siglo XXI, El Soldado Desconocido de Garth Ennis sería un doble episodio de Expediente X a la altura de Sin Perdón. Imprescindible para los seguidores del autor, sobre todo teniendo en cuenta la muy apetecible edicción de ECC. Para más, la completísima reseña del compañero Cristian Miguel Sepúlveda.


Valoración por Pedro Pascual Paredes
Cuando Dc comics empezó a publicar en 2015 la maxi serie The Multiversity de Grant Morrison, muchas críticas o comentarios la aparentaban a los 7 Soldados de la Victoria que el autor escocés había escrito en 2004. Y aunque las similitudes están ahí una invasión asola la Tierra, héroes que no se conocen, varios dibujantes ambas obras son muy diferentes. Aquí, Morrison construye un rompecabezas más que un laberinto, que cualquier lector atento puede realizar y disfrutar sin miedo a perderse en el intento. 7 Soldados de la Victoria está constituido por 7 miniseries de cuatro números protagonizadas cada una de ellas por personajes de tercera, a los que el guionista de Kid Eternity, proporciona un gran carisma y sobre los que explora diferentes géneros para crear historias interconectadas. A destacar el número inicial y final dibujado magistralmente por J.H. Williams III, así como las series de Klarion y Frankestein, dibujados por Franz Irving y Doug Mahnke respectivamente. Sin duda alguna, 7 Soldados de la Victoria forma parte de las grandes obras de Grant Morrison y merece ser leída y releída. Para aquél que quiera saber un poco más sobre este excelso cómic he aquí la reseña que hizo en su momento el compañero Sergio Robla del primer tomo¡DEEL, ETEIS SODADLOS ED AL AIROTCIV, ON SO SIÉRITNEPERRA!


Valoración por Daniel Gavilán
Tras echarse unas risas tirando vitriolo contra todo en la parcela Marvel Knights, Ennis hizo Historia con una de las obras maestras más indiscutibles que ha dado la Marvel del presente siglo en la línea MAX. Esta es el tomo con el que arranca todo, trasladándonos a la guerra del Vietnam para narrarnos el germen del hombre que se convertiría en el Castigador desde mucho antes de que su familia muriera a manos del fuego cruzado de una guerra de banda en Central Park. Incluyendoa junto a Nacimiento los relatos cortos La Celda y El Tigre, aunque el nivel de calidad de las tres historias no es del todo parejo, las cotas de intensidad de dos de ellas son tan altas, que es como reencontrarse con una camino olvidado que en su día labrasen obras como Senderos de Gloria o Apocalypse Now!. Abismos humanos en la cara oscura de nuestra historia reciente, reeditada en una maravilla de reedición de Panini para la que no hay pega posible.


Valoración por Daniel Gavilán
Segundo arco del Capitán América de Nick Spencer, y aunque fue promocionado por Marvel como un evento por el 75 aniversario del personaje, se puede seguir sin ningún tipo de añadido. El tono es completamente diferente al anterior moviéndose entre las tramas de conspiración gubernamental con sci fi y dilemos morales a lo Wayward Pines, pero Spencer sigue siendo el mismo que tantas alegrías nos viene dando durante los últimos años, siendo tan sorprendente e impredecible, como capaz de saltar de la tensión de gran intensidad al humor más disparatado sin que en ningún momento desvirtuar a los personajes. Con un envidiable e ingenioso tratamiento de los mismos, Punto Muerto es puro cómic de superhéroes en lo que está siendo una deliciosa recuperación del espíritu del Capitán América de los setenta.


Valoración por Daniel Gavilán
La otra opción con Punto Muerto es limitarse a los números de apertura y cierre de la saga y pillarse las entregas correspondientes de Vengadores e Imposibles Vengadores con el crossover entre ambas que se montan Mark Waid y Gerry Duggan. El resultado seguramente no sea ni de lejos tan disfrutable, pero tiene cierto interés tanto por el desarrollo de la relación entre Sam y Jane, o las cafradas que se permiten en la División por la Unidad para conducir a una reivindicación de Masacre con su punto de valentía. Bastante mejor Gerry Duggan que un Mark Waid que parece limitarse a dejarse llevar, en una saga que a pesar de su punto de diversión e inventiva se antoja demasiado larga para lo que ha ofrecido.

Soy muy fan de Daredevil pero esta etapa no me llama lo más mínimo, creo que como Shadowland me la salto.
Estoy igual. Las criticas que he leido hasta ahora son generalmente buenas, pero por lo visto basicamente borra de un plumazo todo el desarrollo de Waid y vuelve al Daredevil anterior. Y francamente me da muchisima pereza volver a coger al personaje asi.
Pues tierra de sombras comparada a esto me ha parecido una obra maestra…
Sí sois lectores de tener solo lo mejor de lo mejor, tipo Miller, Bendis, Waid y nada más, seguramente no os sepa a suficiente. Pero si estáis mínimamente abiertos al cambio de tono -que al fin y al cabo la etapa de Waid también lo cambió de forma radical- os recomendaría echarle al menos un ojo, que quitando cierto detalle tampoco desmerece de lo de Nocenti o lo de Brubaker. De hecho diría que Soule se le da escribir a Matt bastante mejor que al bueno de Ed.
p.s.: En realidad no lo borra, marcbret87, ya que sigue habiendo referencias a McDuffie, a su traslado a la Costa Oeste tras tener problemas con el colegio de abogados de Nueva York, etc… Simplemente le han buscado una solución al tema de la identidad secreta para poder expolorar al personaje dentro del marco concreto en el que Soule quería abordarlo, con la fiscalía de Nuva York y los problemas de convivencia social de fondo. Y aunque la forma de lo de solucionar el tema de que su identidad sea pública es tirando a chorra y anticlimática -o al menos a mi me lo parece-, si se pasa por alto y se le da un voto de confianza en plan «venga, a ver que me ofreces», presenta las suficientes novedades para presentarse como una etapa con entidad propia y ser algo más que una repetición de lo mismo. De hecho diría que de momento está siendo la etapa que con más solidez está abordando el rol de Matt como defensor de la ley, algo en lo que se nota mucho la experiencia de Soule como abogado. Especialmente si este es un aspecto del personaje que te interesé, de momento al menos la serie está presentando buenas tablas
Gracias por la respuesta Daniel. De Daredevil he leido mucha cosa, con la Biblioteca Marvel me lei todo el pre-Miller, tambien lei la etapa de Karl Kesel (que ya tenia un tono similar al de Waid), Kevin Smith, Bendis, el principio de Brubaker y la de Waid. Me falta la de Nocenti que la tengo pendiente y seguramente me va a gustar. Asi que en principio lo de querer solo lo mas mejor no es problema 🙂
Estoy de acuerdo en que Waid tambien empieza de la misma manera, cambiando el tono de forma radical, pero creo que ese cambio era muy necesario. Daredevil llevaba ya un buen tiempo en el que su vida era desgracia tras desgracia y, aunque en cierta manera eso es parte del personaje, recuperar el «sense of wonder» era necesario, no esperar a ver que tropelia mas le iba a ocurrir. Aparte, creo que Waid habia creado un muy buen personaje en McDuffie y habia solucionado de manera bastante acertada el tema de la identidad secreta. Pese a que no se olvide del todo la etapa Waid, a mi me cuesta pasar por alto que, al fin y al cabo, es hacer otro reset para empezar con el personaje en la situacion que quiere. Y lo entiendo, y de hecho eso que me cuentas de su parte de abogado me interesa, pero esperare a que haya algunos numeros mas para meterme de lleno.
Suscribo en todo, Marc. La etapa Waid no solo vino cuando tuvo que venir, sino que además lo supo hacer con una maestría equiparable a lo que Dini y Timm hicieron con Batman en la serie animada de los noventa. De hecho diría que a Soule esta pagando el pato por justo lo contrario y venir con una serie de cambios que no solo dificultan pasar de la anterior etapa a la actual, sino que además nadie de los que veniamos siguiendo lo de Waid pedíamos.
p.s.: La coña de todo esto es que si hubieran sido el propio Soule y Pulido con el mismo tono que usaron en Hulka los de la etapa Waid habríamos aplaudido a dos manos. Pero imagino que teniendo en cuenta lo poco que vendió esta y los potenciales nuevos lectores llegados de la serie de Charlie Cox entre todos decidieron apostar por un tono más «Netflix friendly», pero ya podrían haber hecho una transición menos abrupta. Tipo arco de 10 números compaginando los últimos días en San Francisco y la movida esta con Punto Ciego con Javier Pulido y Ron Garney a lo actual Wonder Woman de Rucka por poner un ejemplo
Leyendo ya este primer tomo completo este cambio de escenario ni me convence ni me gusta.
No es que se vaya a tiempos anteriores a la llegada a Mark Waid, es que se va a antes de los tiempos de Bendis, y eso es forzar mucho la maquinaria, no hay credibilidad, ni desarrollo.
Una vez más los productos audiovisuales hacen que una serie de cómic cambie de un número a otro, para que los posibles lectores nacidos de la serie de televisión compren.
Una y otra vez hacen la misma maniobra, venderán cuatro cómics más durante un tiempo, y luego las ventas volverán a donde estaban antes, como siempre suele pasar con este tipo de maniobras.
Sobre eso de que se nota que Soule es abogado y que lo transmite en sus guiones… yo no lo veo más que el trabajo que hacía Bendis, o Ed Brubaker.
¿Charles Soule mejor guionista que Brubaker? Para mi Ed está a años luz por encima, al menos en sus trabajos para Marvel, que ya me han recomendado su Swamp Thing de DC.
¿Charles Soule mejor guionista que Brubaker?
Es que no me refería a su cómputo global como guionista, Dreadstar, sino que Charles escribe mejor a Darededevil -como personaje concreto- que Brubaker, De hecho coincido contigo en que a computo global Ed tiene mejor bibligrafía que Charles, pero a pesar de la gran saga que se marcó con el protagonista entre rejas, la etapa en Daredevil de Brubaker siempre tuvo un problema y fue… el propio Daredevil.
Por explicarme, digamos que -independientemente del tono- cuando Bendis, Waid o Soule lo escribían, Matt transmitía una implacable seguridad al borde de la locura, sin importar la jodida que fuera la situación a la que hiciera frente. Con el último tienes por ejemplo una escena que puse en el QEPEECA, donde Daredevil acojona a un delincuente, y en lugar de ir a por él lo deja escapar hasta un escondrijo donde se reúne con los compañeros de su panda, mientras DD esboza una media sonrisa mientras podemos leer su monólogo interno pronunciando una frase del tipo «Para que pelearte con un matón, cuando te puedes pelear contra cuatro».
Lo mismo para la secuencia del puente incluida en este tomo con esos «pensamientos» socarrones al borde de lo suicida sobre el tema de la limpieza del río. Con Brubaker sin embargo teníamos un Daredevil en el que no quedaba ni rastro de su lado «batallador» y que se venía abajo por todo, lo que personalmente hizo que me resultada un DD -como personaje- algo inferior en comparación al que encontramos con Bendis, Waid o Soule.
p.s.: Lo que sigo sin ver es la comparativa que haces del DD de Soule con el pre-Bendis. ¿Te refieres al de David Mack, el de Kevin Smith, Joe Kelly o cual? Más que nada, porque no veo demasiadas similitudes con ninguno de estos. De hecho, es precisamente con el de Bendis con el que le veo más parecido en cuanto a tono y forma con la que escribir al personaje, porque ese salpiqueo de cuadros de texto en el que le vemos describir diferentes rasgos de alguien que se le acerca -sobre lo gastados de sus zapatos, el olor de lo que ha desayunado por la mañana, etc…- no podría ser más hijo de la etapa del creador de Alias
Por lo de etapa pre-Bendis, me refería al estado general de Daredevil, es decir, identidad secreta, que con Soule se ha vuelto a ese estatus, no quería hacer paralelismos entre las similitudes entre las diferentes etapas… que cada cual tenía sus propias características, aunque en líneas generales Daredevil había mantenido en líneas generales una coherencia interna envidiable.
Lo del carácter suicida del personaje es algo que tiene en su ADN, y yo es algo que siempre he visto en él, por lo tanto, no me choca, y que en aquellos 7 números escritos por Dematteis se exploró.
La etapa de Brubaker, pues no recuerdo dónde, lo he buscado en internet, y al menos no he sabido encontrarlo, pero juraría que declaró que sus intenciones eran lidiar con las consecuencias de lo que Bendis dejó, y que por tanto no iba a cambiar nada, ni iba a volver a la identidad secreta, porque ese cambio ya estaba hecho y no veía forma alguna de darle marcha atrás.
En ese punto, Bendis deja a Matt destrozado, a todos los niveles y Brubaker ahonda en esa situación, siendo coherente con todo lo planteado por Bendis al final de su etapa.
Ahora tendré que releer el Daredevil de Brubaker, porque no recuerdo esa etapa como un Daredevil sin su habitual carácter «batallador», muy al contrario, lo recuerdo como una etapa donde siguió sufriendo de lo lindo, pero manteniéndose a flote tanto como sus circunstancias le dejaban.
En cuanto a que Soule escribe mejor a Daredevil que Brubaker… no sé cuál ha sido el último número que ha salido (vamos, no sé el número actual de su andadura) pero aún es bastante pronto para afirmar que Soule ha hecho un mejor trabajo en la serie que Brubaker.
Hombre, es que no me refiero a la etapa en sí, Dreadstar. En eso Soule todavía tiene mucho que demostrar frente a Brubaker -bueno, en verdad no tanto, ya que tampoco es que dejase demasiada huella en el personaje-. Lo que me refiero es a la caracterización en sí, eso que con solo leer un puñado de cómics o ver un tramo de película nos permite ver si un guionista está entendiendo mejor que otro lo que define a un personaje o que Zack Snyder sería capaz de reconocer a Superman aunque se le pusiera delante
Buenas. Quizá esto no vaya aquí, pero me gustaría comenzar a leer Marvel desde All-New All-Different (si es posible), y quería preguntar sobre que series seguir para poder meterme de lleno en Civil War II. Las imprescindibles y luego las recomendables, puesto que creo que seguir el evento saldrá mas o menos caro… Muchas gracias
Puedes saltar directamente al evento si quieres y tampoco necesitas leer ningún cruce para entender el evento. Respecto a All-New tienes muchas reseñas en esta web, así que échale un vistazo al catálogo y luego busca nuestra opinión aquí. 😉
En breve, Locke 🙂
Desconcertante el «DD Noir» de Soule y Garney. Está todo como reducido a la mínima expresión (yo creo que asfixiado por la serie de tv) con un Garney a lo art decó, sin el cual la serie no se sostiene. Me gusta y me disgusta a partes iguales, veremos dónde termina inclinando la balanza.
A mi me gustaba Ron Garney… hasta que he leído este Daredevil…
Tengo toda la serie de Daredevil, del primer al último número publicado en España y esta es, sin duda, su peor etapa, con diferencia.
Yo también echo de menos al Garney de Amazing Sp. No digamos al de Estela o el Capi. El tipo es un virtuoso y para vender un trabajo así tienes que ser John Buscema, Joe Kubert o John Romita Jr. O Ron Garney.
Teniendo en cuenta que la etapa acaba de empezar, y el historial que tiene el personaje tanto antes de Miller como entre Nocenti y Bendis, ¿no estamos exagerando como seis o siete pueblos, Dreadstar? 😆 Sobre todo cuando la mayoría de las razones que expones abajo son totalmente subjetivas, que aun podiendo entender que el cambio de dirección haya pillado con el pie cambiado, no deja de ser una valoración personal sobre una decisión concreta que solo vamos a tener aquellos que hubieramos preferido que el personaje siguiera una dirección menos rupturista con la de Waid.
Que afirmes que Daredevil «no necesita un compañero» tampoco lo veo una razón de peso como para que no pueda tener un discípulo y hacerse algo interesante con ello, de la misma forma que tampoco veo mucha diferencia en que el tipo se construya un traje de invisibilidad de bajo requerimiento energético -que tampoco es que sea una armadura hipertecnológica ni nada por el estilo- como Peter Parker se construyese hace los lanzarredes con los recursos de un adolescente de clase pudiente de Queens.
Vamos, que aunque puedan ser razones suficientes para un «pues a mi no me ha gustado», de ahí a elevarla a «la peor etapa de todos los tiempos» dejando de lado cosas como el tratamiento de Soule del marco social, su cuidado narrativo, la impecable caracterización del personaje y el uso de sus habilidades y limitaciones o el uso del contexto social de la Nueva York actual, quizás sea un poco como culparla al hambre en el mundo. De hehco, si hay algo que sí que se me escapa es la crítcia al trabajo de Garney, que por mucho que mire las páginas no veo nada que baje de lo espectacular http://www.comicsuniverse.it/wp-content/uploads/2015/08/Daredevil-Ron-Garney.jpg
Obviamente, toda mi opinión entera se basa en la subjetividad, que es básicamente en lo que se apoya toda opinión… incluida la tuya, por supuesto.
Ese dibujo que has puesto ahí, es muy bonito, como pin-up es espectacular, pero una cosa es un dibujo concreto, y otra muy distinta, hacer que todas las viñetas se sucedan con una intención narrativa, y ahí Garney ha mutado su estilo y sus páginas son borrones, directamente quedan mejor en blanco y negro que con ese color chillón y feo que le han puesto.
Empecé a leer el tomo por la tarde y terminé por la noche, forzando la vista y pegándome a la luz para poder descifrar el batiburrillo.
«…dejando de lado cosas como el tratamiento de Soule del marco social, su cuidado narrativo, la impecable caracterización del personaje y el uso de sus habilidades y limitaciones o el uso del contexto social de la Nueva York actual, quizás sea un poco como culparla al hambre en el mundo.»
Lo de culparle del hambre en el mundo, ahí me has dejado un poco patinando.
Sobre todo lo demás, tratamiento del marco social, cuidado narrativo, impecable caracterización del personaje y etc, pues sinceramente, hemos leído (subjetivamente) un cómic muy diferente, porque yo no he visto nada de eso.
Lo del compañero, pues bien mirado, podría ser, Daredevil puede usar uno, si la valía del guionista hace que el recurso resulte satisfactorio. En mi caso, no he visto tal necesidad, y me ha parecido un intento de crear algo diferente para su etapa, sin mucha base previa.
Alguien podría decir, «Daredevil y la Viuda Negra compartieron cabecera». Pues sí, pero ahí eran compañeros y eran tratados de igual a igual.
Haré el esfuerzo de releer el tomo esta tarde, con buena luz, e intentaré mirar con otros ojos, aunque ya de entrada iba con esa intención.
He leído todo el Daredevil editado en España, insisto, y sólo recuerdo un par de tomos recopilatorios a mitad/finales de los 90, publicados por Fórum, que tengan (para mí, subjetivamente) una calidad tan infame: «Sombras de humanidad», con guiones bajo seudónimo de Allan Smithee, y otro tomo cuyo nombre no recuerdo.
En serio, Tierra de Sombras, me pareció en su momento una historia muy petarda, y la leí con mayor entusiasmo que esto que nos ha propuesto Soule.
Tampoco hace falta que lo releas, Dreadstar, que como dices mi opinión es tan subjetiva como la tuya, y como ya digo no es el hecho de que no te guste lo que me ha llamado la atención -que como ya decía cambios bruscos para sacarle a uno de la lectura tampoco le faltan- si no la hipérbole de “lo peor que se ha hecho nunca!”. Si no te ha gustado tampoco es que te tenga que gustar 😆
Ya te digo que no estoy para nada de acuerdo en eso de que porque nunca haya tenido un discípulo no se pueda hacer nada interesante con ello. De hecho no se me ocurre ninguna razón por la que no pueda tenerlo más allá del “porque no lo ha tenido antes”, que no me parece para nada una razón de peso. Hay otras muchas cosas que el personaje no había hecho nunca hasta que las hizo, y que han pasado a formar parte de la mitología del diablo guardián sin mayor problema.
Pero más allá de estas discrepancias artumentales, lo que me sigue chocando de verdad es lo relativo a Ron Garney. Más si me dices que donde te falla el dibujante es en la narrativa, cuando a mi de hecho me parece de largo lo mejor que tiene este tomo, y no precisamente como algo peyorativo hacia el resto. Podría poner toda la secuencia en el puente, que me personalmente me parece magistral hasta el punto que son detalles tan sutiles como esa camiseta que apenas se nos muestra lo suficiente para que nos fijemos en ella lo que luego nos permite identificar a acierto personaje, o toda la secuencia mostrando los paralelismos entre el héroe y el villano, que difícilmente podría ser más deudora del Iron Man de Byrne y Romita. Pero como en ambos casos son demasiadas páginas, me limito a esta splash page, y como ya digo, no veo ningún defecto narrativo, sino todo lo contrario http://static.comicvine.com/uploads/original/0/40/5024506-dd3.jpg
Por cierto, que como alguien que siempre tendrá a Shawn Martinborough y su etapa con Rucka como una de las mejores y más vibrantes andaduras de Batman a Nivel Gráfico, me temo que en lo del color tampoco estamos muy de acuerdo
Pues no… en el color no nos vamos a poner de acuerdo, porque me sigue pareciendo horroroso…
🙂
Sobre esta nueva etapa de Daredevil, decir que esta misma tarde me he leído el Point One que abre el tomo, y los dos primeros números, y ya me estoy haciendo una idea sobre varias cosas abiertamente ridículas.
La primera: sin comerlo ni beberlo, Daredevil vuelve a tener identidad secreta, sólo conocida por Foggy, y esto justifica una vez más su enésimo cabreo con Matt. ¿Otro mefistazo? De momento no se sabe, ya lo explicarán (si es que lo llegan a hacer, claro está), pero este volver a tiempos muy muy anterior a Bendis, me parece aberrante para todo cuanto han trabajado los guionistas anteriormente.
La segunda: Daredevil tiene ahora un compañero de armas llamado «Punto Ciego». En cuanto lo leí, he empezado a reírme con el nombrecito, por no hablar de que el cuernecitos es el superhéroe menos necesitado de compañeros. No pega ni con cola.
Tercero: Punto Ciego se crea un traje de invisibilidad. Hasta ahí todo correcto, porque inventores hay muchos, y podría ser que un tío que trabaja limpiando cuartos de baños, sea tan inteligente como para crear semejante uniforme.
Ni Reed Richards ni Tony Stark, un limpia baños. No sé si voy transmitiendo la ironía de todo esto. Y ya para remate, el traje funciona con… pilas. Y el ayudante en cuestión no tiene la inteligencia para comprarlas recargables, sino que compra pilas de toda la vida, desechables, y encima se queja por ello….
No he podido parar de reír en cuanto lo he leído, es un absurdo que no se sostiene por ningún lado, y he tenido que dejar de leer semejante bodrio.
Un traje de alta tecnología, pero que funciona con pilas, desternillante, en serio, no creo que vuelva a leer algo tan ridículo, o al menos espero no volver a leerlo en muchos años.
De Soule sólo había leído la muerte de Lobezno y la miniserie de Lando para el universo de Star Wars, y la verdad, ojalá no lo hubiera leído, porque me parece un guionista malo con ganas, aunque el editor que ha permitido que Soule le haga esto a Daredevil tiene más delito aún.
De Ron Garney, pues bueno, algún día llega el declive artístico, y ha sido en esta serie, espero que vuelva a recuperar el sentido y no dibuje a manchurrones, que para eso está Maleev, que por cierto lo hace mil millones de veces mejor.
Ron Garney ha demostrado que puede dar más de sí, con un estilo más cercano a lo que ha venido haciendo y que tan buenos resultados obtenía.
No he leído su material en Marvel, pero debes leer su Swamp Thing o Red Lanterns, y descubrirás que Charles Soule es un guionista muy bueno.
Jordi Molinari, de hecho, muchos amigos me han dicho que parece que hay dos Soule.
El bueno, que trabajó para DC.
El malo, que está trabajando para Marvel.
Tengo que corregirme, también leí sus primeros números para Inhumanos y salí escopetado de la serie, me parecían malas historias.
Sin embargo todo el mundo recomienda su Swamp Thing, así que buscaré la serie, que espero que ECC lo tenga en tomos para leerlo y ver así al Charles Soule que merece la pena, porque este Daredevil… no se sostiene por ningún lado.
Si continúas leyendo vas a comprobar que aún hay algo más ridículo que el tema pilas.
Quédate con esta frase:
«Daredevil el templo»
ZombieSquirtle, anoche saqué fuerzas y terminé de leer los restantes tres números… madre mía, que palo más grande… y sí, tenías razón, aún me quedaban una o dos risas más con el tomito… 🙂
Gracias a la Biblioteca Marvel pude leer todo el Daredevil previo a Frank Miller, y los guiones de Stan Lee y Roy Thomas eran horrendos, pero al menos tenían a Gene Colan a los dibujos.
Llegué a un punto en la Biblioteca Marvel del cuernecitos que ni siquiera leía las palabras, me limitaba a disfrutar de los dibujos de Colan, que hacía composiciones realmente brutales.
Pero eran cómics de su tiempo, y hasta Frank Miller no se hizo la luz artística. A partir de ahí, hubo épocas mejores y peores.
Ahora no entiendo porqué ha tenido tan buenas críticas el Soule con esta serie de Daredevil, básicamente se ha pasado por el forro los últimos 15 años de serie.
Foggy no tiene cáncer. Matt vuelve a tener identidad secreta. De vuelta a Nueva York.
Un despiporre, vamos.
Yo debo ser muy raro porque no pude ni terminar el tomo de Spiderwoman. ¿De verdad es necesario que cada línea de diálogo sea un chiste? La altura del humor quedó reflejada en el primer tomo de esta nueva andadura cuando Jessica Drew fue temporalmente la amante de un irreconocible Morlun. Tan irreconocible aquel Morlun, como la propia Jessica Drew que escribe Hopeless, la cual parece una treceañera obsesionada con ser ‘cool’. El dibujo, magnífico. En cuanto se produzca un cambio de dibujante, no le auguro mucho porvenir a esta serie.
Hombre John, es que tampoco es que estemos hablando de la Viuda Negra, que Jessica Drew siempre ha sido más del perfil de Clint Barton. Por lo demás, tampoco creo que sea todo chiste sin sustancia. De hecho en cuanto a los gajes de gestación, los sacrificios que debe hacer una madre y los retos fisiológicos por los que atraviesa debe ser de lo más ilustrativo que he visto dentro del cómic de superhéroes, y sin la impresión de que te estén soltando la brasa ni de que se haga en detrimento de la aventura de empijamados, lo cual tiene doble mérito
Para mí es un problema de tono, lo encuentro tremendamente infantil. El humor que recorre las páginas, las tonterías que va murmurando esta Spiderwoman sin pausa, parecen más propias de Mattie Franklin que de la más veterana de las mujeres araña; aunque sin el ingenio de Byrne a los guiones (quien en su día, además, presentó una fantástica galería de villanos). Es el tono juvenil y ligero que se ha instalado en todo Marvel, con mayor o menor acierto, pero elevado a una categoría insufrible. Llamémoslo ‘tono Disney’: humor ligero, postureo, ningún sentido del drama y por supuesto ninguna introspección (No obligues nunca al lector a pensar, porque solamente busca divertirse, parecen creer desde Marvel). Las conversaciones con la Capitana Marvel son verdaderamente de instituto.
No se yo, John, así a priori no recuerdo nada más «infantil» de lo que se pudiera encontrar en el Ojo de Halcón de Fraction, el Daredevil de Waid, o las dinámicas clásicas de Spider-Man y la Antorcha Humana o Bestia y el Hombre Maravilla. Vamos, que no es el Punisher MAX de Ennis, pero tampoco recuerdo ninguna puerilidad, sino el tira y afloja Marvel de toda la vida. Como ejemplo sin tener que tirar de Rodriguez:
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– ¿De qué sirvo si ni siquiera se…?
– Lo cierto es que he venido quí para hacer algo, y te necesito de pie a mi lado en la más silenciosa ignorancia, ya que eres mi mejor amiga y el apoyo moral es parte de tu obligación como tal.
– Me parece justo.
Hay un mensaje explícito y otro implicito sin necesidad vomitar las palabras ni darles una grandilocuencia más allá del coñeo cotidiano que alguien pueda mantener con sus colegas, y donde ante todo se deja constancia de una camaradería complice en la que apenás hace falta mediar más palabras que «Te necesito allí» / «Allí me tienes» más cerca de cualquier hermandad adulta con años a las espaldas que del alboroto de las amistades infantiles.
Entre escenas como esa o cualquier diálogo entre ambas sobre la maternidad de Jessica con Carol buscando constantemente formas de facilitarle a la Drew su gestación y Spider Woman marcando fronteras para dejar claro que es cosa suya, pero sin que ninguna de las dos pierda en ningún momento la compostura estoica de cualquier Batman, Superman o Wonder Woman -fina coña sobre la comadrona incluida- no veo nada que denote inexperiencia ni infantilismo por parte de ambas. O al menos hasta donde recuerdo, claro, que ahora mismo no tengo los tomos delante
Estas dos viñetas deben ser lo mejor del primer tomo. Tanto es así, que no reconozco al propio Hopeless. De hecho, no las acabo de ubicar… Pero por el uniforme ‘añejo’ que lleva Jessica tienen que ser del primer tomo de los tres que llevamos. Seguro que hay más ejemplos como este de que Hopeless sabe escribir, pero apostaría que puedo sacar el doble de ejemplos del tono infantil del que hablo. Recuerdo una viñeta, un primer plano de Jessica mordiéndose el labio inferior a lo Miley Cyrus xD Pero bueno, tampoco pretendo convencerte de nada xD Los gustos son muy subjetivos. Curiosamente, a mí Hopeless me está gustando en All-New X-Men, que no es precisamente la colección predilecta de la crítica ni de los fans.
De hecho fijate si es así, que a mi es en la de la Patrulla donde no me termina de convencer 😆 Pero bueno, es lo que dices, ya que a veces simplemente conectamos mejor con la forma de escribir en unas situaciones que en otras, y siendo Hopeless alguien que tampoco tiene una voz muy definida y se amolda según el caso, se debe notar todavía más. Pero vamos, lo bueno en estos casos como comentas es que haya siempre variedad y que cada uno tenga posibilidad de elegir entre lo que más encaje con sus apetencias, que si a todos nos gustase lo mismo o todo estuviera orientado en un único tono sería muy aburrido 🙂
La variedad siempre es enriquecedora. Totalmente de acuerdo 🙂