Qué está pasando en el cómic americano (+43)

Welcome back a la jaula. Como no fuistéis pocos los que pedistéis menos rollos y mas entrar directamente a la chicha, dejémonos de prolegómenos y enteremos directamente al jaleo con este Qué está pasando en el cómic americano 43. Para comenzar, dar cuenta de la cancelación de las series tanto de Nova de Ramon Pérez y Jeff Loveness como de Star Lord de Chip Zdarsky y Kris Anka. Dos series estupendas que merecieron mucha mejor suerte que sus predecesoras a cargo de Sean Ryan y Sam Humphries, y que a pesar de contar con equipos creativos tan interesantes como los que se han hecho cargo de ellas, aportaciones tan loables como la recuperación de Richard Rider y propuestas argumentales más que potentes, han terminado su recorrido mucho antes de lo que podían y debían haber durado.

La pregunta con esto sería un poco la de siempre. ¿Ha quemado Marvel la popularidad de sus personajes cósmicos con tanta serie a lo largo de estos últimos años? ¿Tanto que incluso cuando lanza dos series muy buenas de los mismos terminan dándose con un canto en los dientes? Convendría considerarlo y centrarse en producir una serie de los Guardianes de la Galaxia sólida que devuelva la confianza a la parcela cósmica antes de volver a considerar el expandirse con spin-offs y demás. En Gerry Duggan confiamos para ello, esperemos que -además de recuperar cabos sueltos de la etapa de Abnett y Lanning como ya ha anunciado con la Hermandad de los Raptores- cuente con el bueno de Rich (Rider) en su colección. A él, Sam y Quill, mucha mejor suerte la próxima vez, y gracias por las series que nos habéis ofrecido. Han sido breves, pero sumamente disfrutables.

Y dicho esto, démosle movimiento al Qué está pasando en el cómic americano 43:

Nota para mi mismo. He de dejar de hablar de los números #1 de las series indie. Debo. He de dejar de hablar de los números #1 de las series indie. Porque el día menos esperado el compañero Sergio Aguirre va a coger el mazo de pegar y me la va a liar por meterme en su huerta. No puedo hablar de series como World Reader de Jeff Loveness y Juan Doe así como así. Pero la verdad es que con las nuevas series de Cary Bates para Image cuesta resistirse. Primero fue el señor mayor con el espadón y la demencia senil…

Y ahora los chupasangres paletos, mitad American Vampire mitad Southern Bastards.

Fin de la separación más ruidosa del cómic de superhéroes. O casi. Termina el crossover entre las tres cabeceras del mercenario bocazas. Wade y la reina de los monstruos Shiklah no more. O tal vez…

Sea como sea, la cuestión es que el crossover ha terminado. Y ojo, porque hoy el día viene cargado de crossovers y macrosagas. Termina, y a partir de aquí mucho ojo para quien siga la serie a ritmo español. Porque se vienen SPOILERS. Y de los gordos. La cuestión es que -como vimos semanas anteriores- el mercenario bocazas se busco un poderoso aliado para evitar que su señora desatará el Inferno en Nueva York. ¿Que que tal funcionó la cosa? Un poco tal que

Que bien le ha sentado a Margeritte Bennett Kate Kane, y Kate Kane a Margeritte Bennett. Tanto como Steve Epting a ambas.

Dicho lo cual… Music:

Arranca la serie regular de Kid Kaiju y sus monstruos. Con la inefable Elsa Bloodstone para acompañarles. El caso es que entre los comentarios -disculpad a los que no os haya contestado aun, trataré de remediarlo en cuanto me sea posible- el compañero Hammanu comentaba que no tenía muy claro si de pequeño le habrían atraído las series actuales dirigidas para público juvenil. Con el caso de la Chica Ardilla ya expuse que -como buen fan del Superman de Richard Donner y los cartoons clásicos de Warner Bros- ya lo creo que sí, y aunque esta suerte de Ben 10 / Dónde viven los monstruos con Kaijus tampoco ha conquistado a mi yo adulto tanto como la serie de Doreen Greewn, si que no me queda duda que a mi yo prepúber lo de la idea de un crío apasionado por el dibujo que vive aventuras increíbles junto a las criaturas gigantes surgidas de su imaginación es algo que le hubiera llamado el ojo sí o sí.

Pardiez, era esto precisamente lo que molaba de Zandor y los Herculoides. O de la serie animada de King Kong. O de la serie animada de Godzilla, que fue lo mejor que dio el desmadre de Roland Emmerich. Con permiso del tema de Jamiroquai. El caso es que junto a la nueva serie del nuevo superhéroe juvenil de Marvel tenemos el regreso de

Uno de los mejores hallazgos de Green Arrow durante los Nuevos 52 fue el giro dado al padre de Oliver Queen. Por cortesía de Jeff Lemire y Andrea Sorrentino. El Green Arrow del pasado y el Green Arrow actual. No deja de ser algo similar a lo que hicieron con Hyppolita / Wonder Woman tras la Crisis en Tierras Infinitas, pero dio un vínculo especial a la continuidad de los Nuevos 52 con la clásica. Eso por no hablar de que -de alguna forma- servía para paliar el vacío dejado por Connor Hawke. Manteniendo de paso el tema del legado generacional.

En lo que atañe a la actual colección, uno de los mejores hallazgos del Green arrow del Renacimiento tiene nombre y apellido: Juan Ferreyra. Decir que con su regreso en este número nos brinda uno de los mejores comics de la semana es una afirmación que se queda tan corta que mejor voy a añadir lo siguiente: ¿Recordáis aquel famoso número del Iron Man del Iron Man de John Byrne y Romita? Ferreyra lo lleva dos o tres pasos más allá-

Pero como no solo del arte vive el hombre, destacar que en lo que respecta al argumento alguien está reuniendo a un puñado de peligrosos asesinos para liársela a Oliver y su ciudad. Y aunque tampoco los vamos a desvelar a todos, sí que incluye más de un
viejo rostro conocido. Cuidado con esa mujer, Ollie, que tendrá el mismo gusto en color que tú.

Riri Williams se da a conocer al mundo como Ironheart. La nueva y flamante padawan de Tony Obi-Wan Stark.

A parte de cruzarse con un buen puñado de rostros familiares del universo Marvel y dejar clara su devoción por la obra del Iron Man de toda la vida, la nueva vengadora dorada tiene ocasión de visitar la sede de sus industrias, y -como ya comentamos esta tarde que nunca puede faltar cuando toca darse un paseo por el santa sanctorum de Stark- Stefano Casselli nos brinda todo un señor

Ya prometía con el teaser. Pero la aproximación de Skottie Young a Lobo Solitario y su Cachorro ha sido absolutamente demencial. Contando los días para su especial I Hate Image Comics. Ah, y cierra la boca, Larry. p.s.: Esta es otra serie que bien podría dar pie a una enorme serie animada. ¿Cómo nadie se ha hecho con los derechos aun?

G. Willow Wilson y Takeshi Miyazawa nos brindan uno de los cómics con más carga emotiva de la semana.

Tan emotiva, que hasta a Kamala le nubla el juicio y decide que la mejor forma de combatir

Alguien en DC nos lee. Que sí, Patrick Gleason y Peter J. Tomasi siguen revitalizando y llenando de frescura la franquicia de Superman como llevaba décadas sin verse. No se podía dar menos con alguien como Jorge Jimenez ilustrándoles. Pero alguien en DC nos lee. Más que nada por lo que veníamos comentando de que deberían aprovechar a estos dos demonios para asentar sus quinta generación de superhéroes, y así permitir que las otras cuatro sigan creciendo. Y desde luego parece que se han puesto las pilas para ello.

Ya sea con su reaproximación en Super Sons del

Prometo que no tengo nada contra los Inhumanos de Charles Soule. De verdad. Bastante ya tuvo con la forma en la que le tocó hacerse cargo de la serie. Pero la verdad es que fui incapaz de disfrutar de lo que leí de la misma tanto como su Hulka o su Cosa del Pantano. Tampoco es que le faltarán grandes momentos. De hecho tuvo un buen puñado de los mismos y de ideas más que apreciables. Así que se me vengan a la cabeza, la saga con Rayo Negro controlado por Máximus. La mini-serie de Secret Wars. E incluso la mini-saga con Lector y El Capo de Ennilux (¿Ves? No me puedo tomar en serio un culto milenario de inhumanos italianos cuyo líder se haga llamar El Capo, sin pensar que en cualquier momento van a aparecer Tony El Gordo, El Piernas y Johnny Labios Sellados).

El caso es que aunque tampoco estaba mal, le faltaba todo ese mamoneo impredecible que le pido a cualquier serie de grupo. Pues bien. En ese aspecto, he de decir que con solo tres números Al Ewing ya me ha ganado por completo. El porqué puede ser uno de los SPOILERS mejor orquestados que llevo sin ver desde tiempos los X-Force de Milligan y los Allred. Si alguno tenéis muy claro que vais a leer esta serie, mejor saltad esta parte y pasad al siguiente cómic. Para los que andáis algo reacios respecto a si meteros o no en una serie de los Inhumanos y necesitéis un aliciente extra, allá vamos. Pero antes será mejor poner algo de contexto.

La serie de Ewing arrancaba dando un salto al futuro. De unos cuantos cientos de años o así. Allí encontraríamos a un mundo futurista con un venerable anciano que a través de su monólogo interno se revelaba como el último inhumano. Un fantasma de otro tiempo en medio de un planeta que había evolucionado como un sistema consciente con metahumanos que ejercían las diferentes funciones de su sistema interno. Protección inmunológica, defensa, reparación, etc… El caso es que este inhumano afirmaba haber formado parte de la partida que viajó a Hala para reponer la terrigenesis. La partida formada por Medusa, Rayo Negro, Cristal, Gorgon, Swain, Flint y el guerrero kree mutado Noh-Varr. Una partida de la que además se nos informa que no todos volverán con vida.

Estimada Disney. O quién sea que tenga los derechos de la obra de Jim Henson. ¿Ante la puerta de quién hay que ponerse para que esta maravilla se lleve al cine?

Que no diga Soule que todo son palos para él hoy. Porque ahí sigue con su saga sobre cómo recupero Matt su identidad secreta. Y vaya Crisis de los Daredevils Infinitos se acaba de marcar con Marc Laming a los lápices.

Se acabaron los rodeos. Basta ya de bromas. Que entren los… Err, ¿smileys? Nos metemos de lleno en el terreno de los crossovers. Empezando por DC con toda la movida de Watchmen.

Tampoco te pongas así, mujer. Que por mucha herejía que pueda ser, la cosa de momento tampoco está tan mal, y por mucha barrabasada que hagan el viejo Alan Moore ya está curado de espantos. Nuestro compañero Pedro Pascual Paredes ya habló en su reseña del arranque de La Chapa. Un cómic que ya deja entrever que de aquí a unos años no va a faltar la gente que llame a Tom King de vendehumos. De dedicar 20 páginas a no contar absolutamente nada salvo una escena de introducción. Además con un recurso que ya ha usado más veces de las que puedo contar. Ya le pasó a Bendis y tiene toda las papeletas de que tarde o temprano sus recursos comenzarán a hacerse familiares y seguirá el mismo camino. Yo por mi parte que siga. Que voy a seguir disfrutando de joyas como esta tanto como el primer día.

El caso es que su cómic es uno de los tres de esta semana que avanzan terreno en el misterio de Watchmen. Primero con el enfrentamiento entre Batman y el Flash Reverso

Y si en DC están con su Renacimiento, en Marvel arranca por todo lo alto el Imperio Secreto de Nick Spencer. Con cuatro comics de la saga nada menos. Cuatro. Más madera, esto es la guerra. Recomendando leerlos en el orden indicado, el guionista ha revelado como la saga era originalmente una historia de Rick Remender en la que se revelaría como los integrantes de numerosos grupos de superhéroes eran en realidad agentes de Hydra, pero que al heredarla él terminaría derivando por los derroteros que la ha llevado él. Unos derroteros que a día de hoy sigue generando una fuerte controversia con las redes sociales volcadas en su contra acusándole de nazi comunista fascista bolchevique.

Casi no es de extrañar que prácticamente al arrancar el evento Marvel haya anunciado a Jason Aaron al frente de un próximo escenario editorial que rebaje la carga política. Algún día habría que analizar como han virado en tan poco tiempo las tornas en lo que respecta a cómo la sociedad recibe la temática social, y cómo -aun siendo indudable que siguen dejando grandes historias- la imagen de guionistas como Spencer, Bendis, Waid, Remender o Slott parece haberse enturbiado por un incesante cúmulo de polémicas. No debe ser casual que Marvel haya elegido a un Aaron que -a pesar de que más de uno se la tiene jurada aun en estos lares por empoderar a Jane como la nueva Thor- para hacerse cargo de los 18 meses de Legacy. Pero antes de cederle el testigo, Nick Spencer parece decidido a morir matando de la forma más contundente de la que pueda ser capaz. Haters gonna hate. El resto, para disfrutarlo que estamos.

Empezamos con los Vengadores USA de Ewing, que de los cuatro es el más preparatoria. Aunque DaCosta se va a arrepentir -y mucho- de haber pasado por el aro de integrar su organización en la infraestructura de defensa norteamericana. No se si alguno de vosotros fue el que preguntó que había sido del hijo de Bala de Cañón. En caso positivo, en esta última entrega los hemos tenido a los dos junto a Izzy. Hecha esta mención, saltamos al jaleo grueso con el final de los Thunderbolts de Jim Zub. Zemo vs Bucky. Los Amos del Mal contra los Thunderbolts. Thunderbolts vs Thunderbolts y

Más allá del portadón de este número, y como acabó la trolleada que se marcó los anteriores números, un consejo de amigo: Cuidado con Priest, porque no solo te hará sufrir, sino que además continuarás volviendo a por más. En reiteradas ocasiones.

Volviendo al tema con el que arrancábamos el post, esta semana no solo concluyen varias etapas a la par que la serie regular del Star Lord de Kris Anka, sino que también hay otras cuantas que se quedan en puertas de hacerlo. Termina por ejemplo Seda de Robbie Thompson tras cerca de una treintena de números, dejando al personaje en una situación con la que no parece que vaya a tardar en reaparecer demasiado, pero ante todo mostrando su empeño de ser un relato intimista de sanación personal. También termina Mundo de Wakanda con un sorprendentemente entonado relato de Kasper Cole a cargo de Rembert Browne y Joe Bennett, que promete no vamos a tardar en volver a ver al Tigre Blanco de los últimos días de Priest por la serie de Ta-Nehisi Coates. Gran uso del blanco en dicha historia.

Por lo demás, se queda a un número epílogo de concluir el Doctor Extraño de Jason Aaron y Chris Bachalo, como también lo está ese Nemo in Slumberland de los superhéroes que es el Caballero Luna de Jeff Lemire y Greg Smallwood. Todas ellas se despiden junto la última serie de Peter Quill a cargo de Anka y Zdarksy. Y si en la serie de Howard el Pato el guionista de Kaptara devolvió a Tía May al mundo laboral, aquí nadie podrá decir que niegue una buena alegría al cuerpo dentro de su afición gerontófila

Y otra vez Chip Zdarsky. En esta ocasión con Matt Fraction a los guiones. Que por cierto, ¿qué es de él? ¿Sigue embarcado en uno de sus proyectos televisivos junto a Kelly Sue Deconncik? Porque últimamente a penas se le ve escribiendo nada en comics. Aparte de mostrarnos que tiene una versión de Howard el Pato que Marvel no le dejó publicar, Zdarsky nos invita a aprovechar este último día de fin de semana para arreglarnos y salir a disfrutar.

Ah, espera

Ya sin más, terminemos este Qué está pasando en el cómic americano 43. Menciones cómo que la portada de Venom ha terminado siendo cualquier cosa menos publicidad engañosa. Welcome back, viejo. Para que luego esa parte de la vieja guardia que repudiaís de cualquier cosa posterior a 1939 digáis que Marvel no os cuida. Para risas, la versión de Warren Ellis de Martian Manhunter en The Wild Storm. Hola, literalidad.

Tiene cierta guasa también que para la forma tan tontorrona que comenzó esta saga de los Protectores, el último arco de El Asombroso Hulk haya terminado como ha terminado. La magia de Greg Pak, supongo. Pena que de la magia que no vayamos a seguir disfrutando es de la de Phil Jimenez y su Superwoman, con lo que sea que le haya pasado con DC Comics. Muchas cosas se han mejorado con el Renacimiento, pero otras por desgracia siguen ahí.

Del sofisticado espectáculo visual de espías que James Robinson y ACO nos brindan en Nick Furia también hablaría. Pero ya se encargó nuestro compañero Igor Álvarez con su reseña. Otro día ya os hablaré de las cafradas de Becky Cloonan en The Punisher. Como ya nos hemos alargado más de la cuenta, mejor pasar a lo que dió de sí la encuesta de la semana pasada.

Para empezar, el pueblo habla y deja claro que quiere un Zona DC Plus independientemente del número de noticias que DC publica a la semana. Da igual si hay que crear las noticias a partir de lo que veamos en un par de previews. También queda muy claro que la gente ha disfrutado del paso de Sam Wilson como Capitán América. Aguante Capi Halcón, desde Zona estamos con usted. Segunda opción más votada nada menos. Tras él, que se vea a Supergirl más a menudo con la familia Superman. Y por supuesto más Flash. Los X-Men Blue de Cullen Bunn también obtuvieron más votos que los Gold de Guggenheim a pesar de no contar con ningún dibujante liándola, y la Chica Ardilla obtuvo una victoria incontestable contra Ayn Rand.

¿Qué ganará en la encuesta de este Qué está pasando en el cómic americano 43? Vosotros decidís. Para terminar, que menos que algo más de música.

Vosotros opináis

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