Shin Mazinger Zero 01

Analizamos el primer tomo de esta serie editada por Ivrea que reimagina la historia de Mazinger Z, del maestro Go Nagai.

4
8513
 

Edición original: 真マジンガーZERO, Akita Shoten.
Edición nacional/ España: Editorial Ivrea.
Guión: Yoshiaki Tabata, Go Nagai (idea original).
Dibujo: Yuuki Yogo.
Traducción: Marcelo Vicente.
Formato: Tomo manga rústica con sobrecubierta (13×18), 200 páginas.
Precio: 8,50€

 

Mazinger Z es una de las historias más influyentes del anime y el manga, así como de la cultura japonesa, y me atrevería a decir más, la cultura occidental inclusive. Marcó a toda a diversas generaciones a lo largo del mundo en los 70 y en los 80, especialmente su anime, y fue uno de los precursores de un género tan importante para la industria del manga y el anime como lo es el Mecha. Y todo ello fue gracias a un genio, poco reconocido aquí en España como es Go Nagai, y lo es básicamente por la falta de edición de sus obras, algo a lo que parece que se está poniendo remedio con la edición de Cutie Honey de Ooso Ediciones , la ya anunciada Devilman de Panini, así como Devilman G, que ya la está editando Ivrea desde hace unos meses.

Y aunque no es directamente de Go Nagai, Shin Mazinger Zero, obra de Yoshiaki Tabata y Yuuki Yogo y que también está siendo publicada desde el mes de octubre por Ivrea, sí que es otra obra muy recomendable para acercarse al universo de Go Nagai, puesto que, respetando los personajes y ciertos matices típicos del autor, crea una historia con un tono muy distinto del clásico entre los clásicos que es Mazinger Z. Hoy hablaremos solo del primer tomo, aunque ya podemos conseguir en las librerías el segundo, y el tercero llega a finales de este mes, aproximadamente.

Koji Kabuto está destinado a pilotar el Mazinger Z, robot construido, heredado y legado por su abuelo, Juzo Kabuto, para que protegiera a la humanidad y a sí mismo. Tras morir asesinado por el Barón Ashura, pérfido súbdito del malvado Dr. Hell, Koji jura vengarse por el daño que ha sufrido y proteger el mundo de los crueles y maléficos tentáculos del Dr. Hell y sus secuaces, acompañado por supuesto de su amiga y amada Sayaka Yumi. Este es el argumento original, resumido en muy pocas palabras, de Mazinger Z. Pues bien olvidad todo, o casi todo ello, porque Yoshiaki Tabata le da la vuelta a todo y nos plantea qué pasaría si Mazinger Z, como dios demoníaco todopoderoso, arrasara la tierra con su infinito poder debido a que Koji Kabuto nunca se atrevió a subir y pilotarlo.

Deciros más sería entrar en un absurdo spoiler que fastidiaría buena parte de la trama, pero lo cierto es que está repleta de giros inesperados, especialmente con la actitud de determinados personajes como el profesor Kabuto, y del propio Koji, de quien el autor recoge esa venganza e ira innata del personaje, que fue su primera razón para subirse al robot en la obra original, para convertirlo en la motivación principal del personaje, volviendo a Koji un absoluto berserker fuera de sí. ¿O no? Porque, como os digo, está historia de ciencia ficción está repleta de sorpresas, personajes clásicos reinterpretados, y otros nuevos muy misteriosos.

Una obra recomendable ya no solo para los lectores clásicos del manga original y del anime emitido aquí en España hace ya unas décadas, que sentirán esa nostalgia que te llena el pecho como el aire fresco y puro, sino también para lectores nuevos como un servidor, que evidentemente conocían la obra original, pero que nunca se han acercado lo suficiente como para considerarse un fan de la misma.



Yuuki Yugo
es el artista encargado de darle forma y dibujo a esta nueva reimaginación de la historia original de Go Nagai. Y su estilo, lejos de lo que hace Rui Takato en Devilman G, que imita el de Nagai, es muy distinto de el del maestro mangaka, y tiene un tono realista pero a la vez también muy shonen, manteniendo los clásicos matices ecchi y guro que caracterizan a muchas de las obras de Go Nagai. El dinamismo y la verticalidad reflejada en las escenas de lucha y la enorme expresividad de los personajes, unido a los excelentes diseños de los mechas, son los aspectos más destacados de un apartado artístico que te hace vibrar con cada página, y que desde luego es la opción más acertada para un reboot de estas características, y con el tono que le ha querido dar su compañero Tabata.

Una obra que fue publicada desde 2009 a 2013 en la revista Champion Red de Akita Shoten, y que después tuvo una secuela, titulada Shin Mazinger Zero vs. Ankoku Daishougun, con el mismo equipo artístico y publicada hasta 2015 con un total de 8 tomos, que esperemos que Ivrea, que ya ha confirmado que evidentemente publicará la primera parte completa de 9 tomos, se atreva también a editar su secuela, porque estamos ante uno de los mangas más emocionantes, vibrantes y endiabladamente entretenidos que he leído en mucho tiempo.

  Edición original: 真マジンガーZERO, Akita Shoten. Edición nacional/ España: Editorial Ivrea. Guión: Yoshiaki Tabata, Go Nagai (idea original). Dibujo: Yuuki Yogo. Traducción: Marcelo Vicente. Formato: Tomo manga rústica con sobrecubierta (13x18), 200 páginas. Precio: 8,50€   Mazinger Z es una de las historias más influyentes del anime y el manga,…
Guión - 8.2
Dibujo - 8.5
Interés - 8.5

8.4

Reimaginación

Un Mazinger Z reimaginado y reinterpretado con lo mejor de Go Nagai y un nuevo tono violento, oscuro, apocalíptico y con una trama de ciencia ficción y viajes temporales muy interesante.

Vosotros puntuáis: 8.2 ( 12 votos)
Subscribe
Notifícame
4 Comments
Antiguos
Recientes
Inline Feedbacks
View all comments
Raku
Raku
Lector
14 febrero, 2019 1:41

Lo iba a dejar pasar por no ser la original de Nagai (como hice con el Devilman G), pero la reseña me llamó la atención. ¡Habrá que echarle un vistazo!

Raku
Raku
Lector
En respuesta a  Cristian Miguel Sepulveda
19 febrero, 2019 8:48

Ese es el tema, que para ver un sucedáneo, ya me acerco directamente a la obra original. Por eso este Shin Mazinger Zero me llama y Devilman G no.

Ya que estamos, aprovecho para preguntar, que no tengo ni idea. ¿Hay algo de Mazinger Z publicado en España? Además del aquí reseñado y del Mazinger Angels, digo.