WE3, de Grant Morrison y Frank Quitely

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Edición original: jun. 2004/ene. 2005; Vertigo (DC Comics).
Edición España: dic. 2005; Planeta DeAgostini.
Guión: Grant Morrison.
Dibujo: Frank Quitely.
Entintado: Jamie Grant.
Portadas: Frank Quitely.
Color: Jamie Grant.
Rotulista: Todd Klein.
Precio: 8,95 € (Rústica, 112 págs.)

 

Desde su creación en 1993, la línea Vertigo, perteneciente a DC Comics, se ha revelado como una alternativa temática y estilística al comic-book mainstream. Destinadas principalmente a un lector adulto, las numerosas publicaciones de este sello se caracterizan por ofrecer un tratamiento serio e innovador a historias tan originales como provocadoras. Y precisamente dentro de este sello, que durante los últimos 12 años ha dado cobijo a algunos de los creadores más afamados del medio, se ha publicado la sorprendente y espectacular miniserie que hoy centra nuestra atención: WE3, obra de dos enfants terribles del cómic contemporáneo: Grant Morrison y Frank Quitely.

Grant Morrison
, nacido en Glasgow en 1960, es sin lugar a dudas uno de los guionistas más famosos dentro del mundo del cómic. Desde sus inicios, y gracias a trabajos tan recomendables como Near Myths, Flex Mentallo, Zenith, Animal Man, Los Invisibles, Doom Patrol, Marvel Boy, JLA, The Flash, o Arkham Asylum, ha gozado del favor de público y crítica. Tras firmar estas obras, Marvel dejó en sus manos el relanzamiento de la segunda serie protagonizada por los X-Men, renombrada para la ocasión como New X-Men. Su periplo al frente de esta colección abarcó el periodo comprendido de junio de 2001 a marzo de 2004, constando de una totalidad de 41 números. Tras finalizar este exitoso proyecto, Morrison se encargó de escribir los guiones de títulos tan dispares como El Asco, Sea Guy, Seven Soldiers, Vinanarama, o la serie limitada que hoy nos ocupa: WE3.

En la actualidad compagina su tarea como guionista de una de las series más esperadas de los últimos años (All-Star: Superman, de nuevo junto a Frank Quietly) con la coordinación de diversos proyectos destinados a recuperar y modernizar distintos personajes DC.

En cuanto a Vincent Deighan, más conocido como Frank Quitely (Glasgow, 1968), comenzó su carrera como dibujante profesional en la revista underground escocesa Electric Soup. Tras una etapa tremendamente productiva de la cual surgieron cómics como The Greens, Blackheart, Missionary Man, Shimura, Inaba, o The Kingdom: Offspring, comenzó a realizar diversos trabajos para las grandes editoriales americanas. Dentro de este periodo creativo destacan Flex Mentallo, The Authority, JLA: Earth 2, Capitán America, New X-Men, WE3 o una de las historias de The Sandman: Endless Nights.

Actualmente colabora de nuevo con Morrison en la serie maxiserie All-Star: Superman (12 números), y se encarga de ilustrar las portadas de la serie Books of Magick: Life During Wartime.

SINOPSIS: “En un centro secreto de investigación de las Fuerzas Aéreas se lleva a cabo un proyecto de desarrollo cibernético que puede resultar revolucionario. Las pruebas se realizan sobre animales domésticos, manipulados quirúrgicamente por los científicos del proyecto AWE, que han creado un tipo de cyborg: criaturas de carne y metal diseñadas para imponerse en los campos de batalla del mañana.

El mayor éxito de los responsables del programa es un trío de prototipos conocidos con el nombre clave de WE3, cada uno de ellos construido y entrenado para trabajar como especialistas en un equipo. Con sus sistemas nerviosos mejorados y reforzados con hardware militar de última generación, WE3 son el arma definitiva; programables, pero con autonomía, leales, pero despiadados.” (sinopsis extraída de la página web de Planeta DeAgostini Cómics)

Alucinante y cautivadora, esta curiosa fábula ofrece lo mejor de dos de los artistas más afamados del medio, empeñados en demostrar en cada proyecto que firman que, lejos de conformarse con seguir los convencionalismos imperantes en la industria, prefieren optar por aventurarse y arriesgar con planteamientos sino innovadores, cuanto menos atrevidos.

WE3 (nosotros tres) está formado por Bandido, Pirata y Chapucero: un perro, un conejo y un gato respectivamente, caracterizados psicológicamente de forma brillante por un acertado Grant Morrison. Y es que el guionista escocés retrata a la perfección los rasgos definitorios de estas mascotas, logrando captar de forma fidedigna el carácter, el comportamiento y las reacciones de los animales en cuestión. Todo ello, por supuesto, llevado hasta extremos hiperbólicos en beneficio de una historia que mezcla ciencia-ficción, acción, y demás temas recurrentes en la extensa bibliografía de este peculiar escritor, como pueden ser la denuncia social, los peligros del ejercicio irresponsable del poder y la defensa del ecologismo.

Pero pese al buen hacer de Morrison, resulta innegable que su compatriota Frank Quitely acapara la mayor parte del protagonismo en este cómic eminentemente visual. El derroche de talento de este discutido dibujante (su trabajo en WE3 debería callar muchas bocas) resulta impresionante, apabullante,…espectacular. Con una diligencia, eficacia, y lucidez pasmosas, Quitely experimenta y juega a su antojo con perspectivas, enfoques, ángulos, encuadres, planos y composiciones para regalar al lector un conjunto de viñetas imposibles que se repliegan sobre sí mismas, se retuercen, multiplican y dividen hasta formar imágenes que permanecerán en el recuerdo de muchos aficionados al mundo del cómic.

Además de aprovechar al máximo los ilimitados recursos que ofrece este medio, el genial artista cuida hasta el más mínimo detalle, recreándose con toda crudeza en los más insignificantes recovecos de cada viñeta y evidenciando un dominio narrativo, una expresividad y un dinamismo que, lejos de ser un tópico recurrente a la hora de juzgar su trabajo, resulta una evidencia contrastable en todas y cada una de las 112 páginas que componen esta miniserie. No en vano, este cómic, en gran parte mudo, podría carecer de todo tipo de apoyo textual, sin que la narración de los hechos se resintiera.

En definitiva, esta pequeña tesis acerca del movimiento, la naturaleza humana y animal, la violencia, el miedo, la supervivencia, el hambre, el compañerismo, la irresponsabilidad y el deseo de libertad es, en mi opinión, uno de los cómics más destacados de este año 2005 que está a punto de finalizar. Sencillamente imprescindible.

Un saludo y hasta la semana que viene! (eso espero)

Última actualización de este artículo: 23 de enero de 2010

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DaniSpite
DaniSpite
Lector
7 julio, 2010 16:07

Acabo de leer esta comic, y solo puedo definirlo como obra maestra.
Grant Morrison firma un guión lleno de emotividad, y sale más que exitoso de la complicada tarea de hacernos creíble su caracterización de las mascotas.
Pero a pesar de ello, y como bien refleja la reseña, es Frank Quitely quien se sale en cada escena de acción y con cada compleja composición de página.  Admirando como admiro muchas de sus obras, como la reciente y también innovadora Batman & Robin, éste puede ser su mejor trabajo.

tha_ki kua
tha_ki kua
Lector
12 enero, 2012 19:45

Cómic interesante, pero para mí no es una obra maestra.
No conecté con los protagonistas. Igual cuando lo vuelva a leer cambie de opinión.

Chinocu
Chinocu
Lector
25 mayo, 2015 0:07

Mi problema con estos comics es que el hype es tanto que cuando lo leo ya me han perdido la gracia. Me pasó con «The Dark Knight Rises» y me pasa con este.

El comic resulta entretenido. Tiene sus momentos emotivos. Esta bien narrado, la historia bien contada y el final muy correcto. Además el dibujo es muy correcto y la narración resulta fluida.
Desde mi punto de vista lo que falla es que nada se sale de lo común. Ocurre lo que todos sabemos que va a ocurrir: te imaginas quien morirá, y muere; te imaginas posibles situaciones, y suceden; y te imaginas el final, y termina pasando.

En general un comic disfrutable, con una historia bonita, y dura, porque no decirlo, y un buen dibujo acompañando, pero no me llegó tanto. Si tuviera que ponerle nota un 6/10 creo que sería lo más correcto.

Un saludo.