Qué está pasando en el cómic americano (+41)

Bienvenidos todos en esta primera mañana de domingo de Semana Santa (+1) para repasar lo más sonado de la actualidad comiquera con este Qué está pasando en el cómic americano 41. Muchas cosas de gran relevancia político social han tenido lugar en el mundo a lo largo de los últimos siete días, pero -viendo los derroteros que han tomado algunas de las secciones de comentarios de las últimas semanas- casi mejor volver a reincidir en la intención de centrarnos en lo estrictamente ligado al noveno arte para que esto no se vuelva a convertir en el frente del Ebro.

Este no será sin embargo el único cambio importante de la sección. Ya que como muchos notaréis la participación de cómic indie se ha visto reducida drásticamente. El porqué es la nueva sección de nuestros compañeros del servicio informativo del cómic independiente USA capitaneada por Sergio Aguirre. Debuts del cómic independiente USA. En ella repasaran lo más destacado de los estrenos indies de cada mes de una forma similar a la que veníamos haciendo en esta sección, así que para no pisarnos los unos a los otros -y qué demonios, porque así me ahorro trabajo- será Sergio quien se encargue a partir de ahora de llevar el grueso de los debuts americanos de las otras editoriales.

Deseándole mucha suerte y que no se olvide de hablar este mes de World War Tank Girl, entramos directamente en materia con la selección de este Qué está pasando en el cómic americano 41:

Mientras contamos los días para que Conner y Palmiotti pongan final a toda esta movida de los vampiros en los que han enredado a la serie, hay novedades en la vida de nuestra arlequín favorita. Novedades con nombre y apellido. Los de Paul Dini. El padre de la criatura está de vuelta para encargarse de la historia de complemento que nos traslada a los días de Amor Loco. Con vistas a extenderse a lo largo de próximas entregas, ¿qué se puede decir de la misma?

Resumiendo que: a) Que por si alguno le quedaba alguna duda, lo de sexualizar a Harley no es cosa de los comics actuales. Ni de la película. Como tampoco fue de los Nuevos 52. Ni de los videojuegos Arkham. b) Que por lo demás todo lo relativo a la Harley Quinn clásica sigue

Era mi intención a la hora de hablar del primer número de los X-Men de Guggenheim el limitarme a lo estrictamente comiquero. Hablar de como la serie parece haber nacido con una intención deliberada de mirarse lo más posible en un espejo. El de los Astonishing X-Men de Whedon. Hablar de como guionistas como Lemire o el que aquí nos ocupa deberían actualizar su imagen del integrismo fanático. Porque el odio y la discriminación racial siguen existiendo. Pero no hay más que mirar las noticias para darse cuenta de que su rostro es mucho más sibilino que antaño. Ya no hay tipos con palos y antorchas en Alemania. Ni gente que se limita a ponerte mala cara en Nueva York (y si bastantes más de los que consideran que el odio y el prejuicio forman parte de la libertad de expresión).

Podría haber hablado del trabajo de un dibujante que a veces parece Phil Jimenez. Otras muchas Whilce Portaccio. Hasta de cómo el propio Guggenheim tiene a bien no limitarse a tirar de la nostalgia por la nostalgia. Que apueste porque los eventos de los últimos años tengan peso y consecuencia. Y si Kitty y Peter vieron su relación frustrada, continúen afectados por las consecuencias de dicha separación y no se limiten a volver sin más.

Tenía incluso algunas líneas escritas a costa de uno de los momentos más divertidos del número, pero hay ocasiones en los que la historia se escribe por si sola, y las circunstancias han querido que el dibujante Ardian Syaf haya protagonizado uno de los casos mediáticos más sonados desde aquellos entintador y colorista que incluyeron varias veces la palabra «SEX» en un número de los New X-Men de Morrison. El problema es que -tal y como recoge Bleeding Cool- en esta ocasión los mensajes subliminales no se limitan a enarbolar la bandera del sexo, sino que enlazan directamente con la controversia provocada en su país (Indonesia) por la interpretación de unos versos del Corán, según los cuales diferentes facciones del país se encuentran enfrascados en una pugna sobre si los musulmanes deberían o no aceptar a un líder cristiano o judío.

En mitad de un clima tan encendido en lo referente a las relaciones entre las tres culturas como el que hay a día de hoy, sobra decir que no han tardado en llegar respuestas encendidas en relación al descubrimiento de estos mensajes ocultos introducidos por el dibujante, siendo necesario que hasta la propia Marvel ha tenido que hacer pública su postura oficial al respecto. No faltando ni la propia explicación del dibujante respecto a la inclusión de estos mensajes, algo que al parecer llevaba haciendo desde trabajos anteriores.

Con toda la tormenta mediática a la que ha dado pie este hallazgo, así como todo el debate sobre si su apoyo a las protestas contra el presidente indonesio suponen la propagación de un discurso de odio contra cristianos y judíos o solo a la interpretación de los citados versos -o si con la situación del mundo actual en occidente estamos en posición de dar lecciones de moralidad sobre la visión que otras culturas tienen de diferentes credos a los suyos-, sobra decir que cualquier otro aspecto relativo al contenido del cómic ha pasado a segundo plano. Ya sea todo lo citado arriba, como el descubrir

Volvemos a citar al compañero Sergio Aguirre. La razón es porque esta semana nos ha recomendado hablar del segundo número de la serie de Daniel Warren Johnson para Image. Y como para esta sección todo lo que Sergio diga va a misa -y porque Extremity puede tener algunos de los personajes femeninos más @#$%& molones de todo el año- mejor dar cuenta de esta hiperviolenta fantasía post-apocalíptica a medio camino entre Ataque a los Titanes, Starship Troopers y El Señor a los Anillos.

Cecil Castellucci y Marguerite Sauvage tienen el honor de haberse marcado uno de los comics más bellos del año. Un número autoconclusiva con dos hilos argumentales narrados en paralelo. Por un lado la historia de Loma Shade. De su origen, quién fue antes de llegar a la Tierra y como nació su obsesión por Rac Shade. Por otro, el presente. Su estancia como Megan Boyer, disfrutando del asueto de la juventud junto a sus nuevos amigos. Disfrutando, mientras les relata su pasado y su pasión. Estrechamente ligadas de forma que a través de un personaje alienígena resulta mucho más ilustrativa sobre las pequeñas glorias y tragedias de la condición humana que muchos otros comics con personajes de carne y hueso, esta nueva de la serie alcanza tal grado de belleza que se me ha hecho difícil no incluir todo el cómic.

Pero cómo tampoco es cuestión destripároslo todo, mejo dejarlo en un ligerísimo aperitivo. El aperitivo, y recomendar encarecidamente la que está siendo la mejor serie del sello Young Animals. Con el permiso de la Doom Patrol de Way, claro.

Continúa la guerra entre Masacre y Shiklah. Como parte de su plan para que su ex-señora no convierta Manhattan en su Inferno personal, el mercenario bocazas ha decidido emprender la búsqueda de un poderoso aliado. Un aliado con una estrecha relación con Shiklah. Uno más antiguo que la mayor parte de las naciones del mundo. Un aliado al que para encontrar deberá sumergirse en las entrañas de una lóbrega guarida. Una guarida protegida por una anciana en lo más profundo del corazón de Europa. Allí es donde Wade y sus aliados podrán encontrar

¿Os acordáis de Power Girl? La original del ojo de buey en el entreteto no. Me refiero a la segunda. Tanya Spears. La de los Nuevos 52. La creada por Keith Giffen en World’s Finest que después daría el salto a los Teen Titans. Los de Pfeiffer. Me refiero a la Power Girl con poderes al más puro estilo Hank Pym. Esa que fue una suerte de precursora a Lunella Lafayette y Riri Williams. Moongirl e Ironheart. Las tres aptas para protagonizar la versión pijamera de Figuras Ocultas. Ese nicho de superheroína adolescente de raza negra con gran coeficiente mental y aptitudes para la ciencia.

El caso es que Tanya ha estado desaparecida del mapa desde que concluyeron los Teen Titans de Tim Drake. Hasta que ahora Priest se ha decidido a recuperarla. Y ya podéis creer que ha sido para darle un buen uso. Tan bueno como

Ahora la duda es quien será el próximo personaje en seguir los pasos de la última Power Girl en este último número de Deathstroke, y acabar como lo hace en esta entrega Tanya Spears. O por lo menos quien debería serlo. Para que no se siga que no os damos oportunidad de marcaros vuestro propio Muerte en la Familia, no os privéis de indicar que otro personaje de cuño reciente debería de seguir sus pasos y acabar como Tanya Spears en la serie de Priest.

 Cargando ...

Si con el antagonista que salía a la luz en los últimos números detrás de toda la movida de Deathwing ya parecía que Dick y Damian lo iba a tener complicado, el dúo dinámico acaba de saltar de la sartén al fuego con la revelación de esta entrega

Marvel debería cuidar el tema de la publicidad engañosa.

No puede ser que presente una portada que promete tantos loles y wtf a costa del dibujo como esta, y que cuando habrás el cómic te encuentres con que

Premio a Fred (Pedro) por la frase de la semana:

Si por norma siempre es oportuno recordar que la serie de Richard Starkins existe, ya me diréis como se puede resistir uno con paginazas como esta.

Dos números cruciales en el camino al Imperio Secreto. Del segundo no vamos a hablar demasiado, ya que son spoilers del tamaño de una catedral. Mientras menos se hable de los mismos, probablemente sea mejor. Eso sí, no se podrá decir que no es algo que se lleve fraguando desde hace mucho tiempo. Eso, y que será mejor que leáis el final del actual arco de Imposibles antes de pasar a la serie de Steve Rogers.

En lo que respecta a la de Gerry Duggan, muchas cosas pasan entre muertes, regresos, despedidas y finales. Un antes y un después acaba de marcarse para el grupo. Y no faltarán las despedidas. Como son demasiadas cosas para resumirlas sin dedicarle un post completo, mejor condensarlo en una única imagen. Que nada mejor para despedirse que

Fin de I am Bane. Y es más tramposo que la clave de wi-fi de el Acertijo. Pero tras veinte números que básicamente se pueden resumir con una única gran macrosaga que se aleja del territorio habitual del murciélago, no me tiembla el pulso al afirmar que Tom King es lo mejor que le ha pasado a Batman desde la marcha de Grant Morrison. Todos los pequeños vicios y faltas que se le puedan achacar no me supone nada en relación con sus virtudes.

Mención especial para acabar este Qué está pasando en el cómic americano 41 a esos comics que le hacen a uno sentirse viejo. En mi caso America de Gabby Rivera. Serie que si me hubiera pillado unos años más joven probablemente tendría en un pedestal por romper con todos los caminos habituales del género y ser un festiva sin descanso de desbordante imaginación (pero que con los que tengo más bien me deja con la idea de que quizás soy ya demasiado viejo para ciertas sustancias). Bullseye de Ed Brissom por su parte sigue queriendo disputarle al Punisher de Becky Cloonan el título a la macarrada Marvel de la temporada.

Si a ello sumamos el team-up de Jessica Jones y Ojo de Halcón, que Bendis haya conseguido que Szimon Kudarsky pase por un dibujante mínimamente competente en Spider-Man, la nueva y dramática vuelta de tuerca del regreso de Richard Rider en Nova, el nuevo fichaje de los Vengadores y cómo han conseguido poner solución al problema de Kang indefinidamente, el gusto que Patrick Gleason y Tomasi les han cogido a las familias de Superman y Batman o el festival de muertes importantes den The Walking Dead. Vamos señores, que la serie se acaba.

En lo que respecta a la encuesta de la semana anterior, el regreso de Lobo dejó huella. Tanta que los que no pedían más de este, exigían más sangre sexo y rock and roll. El interés por el encuentro de Axel Alonso y David Gabriel con los libreros del que ya nos habló también Nacho Teso en el último Zona Marvel Plus también tuvo un lugar destacado, como la apuesta por el relevo generacional, más series como Spider Woman y la Viuda Negra, así como más Legión y Doctor Who.

¿Quienes encabezarán la encuesta en este Qué está pasando en el cómic americano 41? Vosotros decidís.

Vosotros opináis

 Cargando ...