Entrevista con Kieron Gillen, hablando de The Wicked + The Divine

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Tras muchos meses de espera, The Wicked + The Divine por fin ha aterrizado en nuestro país de la mano de Norma Editorial, como gran novedad del Salón del Cómic de Barcelona. La obra de Kieron Gillen, Jamie McKelvie y Matthew Wilson llega así a nuestras manos tres años después de su debut al otro lado del Atlántico, donde con ya más de veinticinco números a sus espaldas se ha convertido en uno de los mejores cómics independientes del momento. Con este primer tomo titulado “El Acto Fáustico”, el tándem Gillen/McKlevie presenta un escenario en el que los Dioses se reencarnan cada noventa años como auténticos ídolos de la cultura pop, siendo amados y odiados por todo el mundo como lo eran las deidades antiguas en su momento. Sin embargo, en dos años, todos estos nuevos Dioses morirán. Tras triunfar con su interpretación de Loki en Marvel Comics, Gillen vuelve a la carga con una selección personal de distintas adoraciones divinas de culturas varias, con una fragil mortal como protagonista del thriller pop-detectivesco con el que arranca la serie. Para conocer más de la serie, hemos querido hablar con el guionista británico que nos ha respondido a la siguiente entrevista.

Entrevista con Kieron Gillen

Pedro Monje: Para un lector que no tenga ni idea de lo que trata The Wicked + The Divine, ¿cómo se lo explicarías?

Kieron Gillen: El concepto central de la serie es que cada noventa años doce dioses se reencarnan en gente joven. Son brillantes. Les aman. Les odian. Atraen a miles de personas que les adoran y les escuchan en masa. Hay rumores en torno a ellos y a los milagros que se supone son capaces de hacer.

Tras dos años, mueren.

Nuestra historia comienza con nueve de estos doce dioses reencarnándose en el mundo y con todo el mundo tratando con estas nuevas estrellas en la sociedad. O, lo que es lo mismo y resumido en una frase: Dioses como estrellas del pop y estrellas del pop como Dioses. Y las dos caras de la moneda son igual de importantes.

P.M.: ¿Cuál es el origen de esta historia? ¿En qué momento empieza a tomar forma en vuestras mentes? Y digo mentes porque entiendo que Jamie McKelvie estaba presente desde el principio…

K.G.: El concepto básico se me ocurrió la semana después de que me dijeran que mi padre tenía un cáncer terminal y que se iba a morir en no mucho tiempo. Estuve muy deprimido durante varios días y en mi cabeza esta historia empezó a formarse, sobre lo efímera que puede ser nuestra vida. La muerte está el centro de The Wicked + The Divine. La serie tiene un filtro de música pop, pero en el fondo, tiene un corazón bastante oscuro. Y sí, como dices, desde un principio todo esto lo planteamos y lo vendimos como “esto es lo que Kieron y Jamie van a hacer ahora”.

P.M.: ¿Esta serie habría podido existir si no hubieran existido antes Phonogram o Jóvenes Vengadores? O, incluso, tu Journey Into Mystery…

K.G.: Creo que TW+TD se construye sobre todo lo que hemos construido, tanto por separado como en su conjunto. Pero también se aleja un poco de todo ello y a la vez es una respuesta a lo que quisimos contar. La verdad es que tras concluir con Jóvenes Vengadores en Marvel, estuvimos planeando retomar Phonogram (The Inmaterial Girl). Hasta que una noche me di cuenta que ese podría ser un mal movimiento.

Empecé a escribir el primer cómic de Phonogram en 2004, y la idea ya me venía de antes. The Inmaterial Girl está ambientado en 2009 y fue escrito en 2010-2011. La idea de volver a esa serie después de nuestro trabajo en Marvel con una serie tan novedosa como fue Jóvenes Vengadores y retomar una serie con tanta historia detrás me pareció como una especie de traición. Con nuestra etapa en Vengadores reivindicábamos lo nuevo y si queríamos seguir nuestro propio consejo, teníamos que hacer algo nuevo. Mirar y analizar el nuevo mundo ante el que nos encontrábamos en ese momento y lo que estaba por llegar. Era el momento de hacer algo nuevo en lugar de acabar algo viejo. Andar hacia delante de la misma forma que hablamos. Página en blanco. Aplicar todo lo que habíamos aprendido de los cómics desde entonces y ponerlo en esta serie.

En definitiva, hacer un nuevo cómic para 2014. Vamos a ello.

Hay mucho sobre el paso del tiempo eh The Wicked + The Divine. Phonogram trataba sobre ser un aficionado. Un fan. Diez años después, lo que quiero hacer es una serie sobre el deseo de ser un creador, y todo lo que tienes que sacrificar por el camino. Escribí Rue Britannia cuando tenía 28 años y no podía dejar de pensar en el horror de cumplir los 30. Empecé a escribir The Wicked + The Divine cuando tenía 38 años y por mi cabeza paseaba la horrible visión de la muerte. Es una historia donde estoy bailando sobre mi tumba.

Así que me sirve para reflexionar cómo he llegado hasta aquí, los amigos que he hecho por el camino, la gente que he perdido y, preguntarme, a ver si ha merecido la pena. Todo ello envuelto en una canción pop. Es la fiesta definitiva. Al final de los tiempos. Y tanto “fiesta definitiva” como “final de los tiempos” son palabras claves.

P.M.: Vivimos en unos tiempos en los que en muchos foros y portales web de cómics se critica sin parar el protagonismo creciente de los personajes femeninos en los cómics. ¿Llegaste a valorar esto en su día o la posibilidad de hacer un reparto completamente femenino?

K.G.: En los primeros borradores del guión hubo un momento en el que había desarrollado ya a siete dioses del reparto y me di cuenta que todos ellos eran mujeres. Parecía como que todas las sub-historias que quería contar tenían que estar protagonizadas por ellas. Durante unos días estuve pensando y jugando con la idea de hacer un reparto completamente formado por diosas, pero luego se me ocurrió una idea para Baphomet y me di cuenta que necesitaría al menos un hombre. Baal y Woden vinieron justo después, y ya todo el reparto faltante.

Tengo que apuntar que WicDiv está ambientada en Londres. Y para nosotros era muy importante que Londres apareciera reflejada como es en realidad. Es nuestra ciudad y nos gusta tal y como es.

Respecto a lo que comentas de las criticas en Internet a este tipo de comics, no puedo contestarte sin pillarme un cabreo impresionante. Solo pensarlo es del todo bizarro. No puedo imaginarme a esos tipos que comentan esas cosas en Internet en la calle. Cada vez que me los imagino pienso que es el tipo de gente que se asusta cuando ve a una mujer y que cambia de hacer. Así que si está todo lleno de mujeres seguramente se vuelvan locos…

P.M.: La música puede ser inmortal, como los dioses que se reencarnan. Dicho lo cual, se suele decir que escribir sobre la música es como bailar sobre la arquitectura. Sin embargo, yo tenía la sensación antes de leer WicDiv que iba a haber más música, como en vuestras otras obras, aunque no es tanto así. ¿Qué puedes comentarnos sobre esto?

K.G.: WicDiv trata de todo. Usamos a la música pop, pero también otros estilos que nos han gustado. Y sí, lo que los Dioses hacen no tiene una relación de 1 a 1 con la música, pero ahí está la línea que es la música que une todo. Como en muchas disciplinas artísticas, es el pegamento que lo transforma en una sensación conjunta. No hay razón para que un conjunto de ruidos no puedan hacernos llorar. Lo que los Dioses hacen se interpreta como una forma de arte, un paso por encima de eso. Si el resto de artes quieren ser música, la música quiere ser esto. Así que por eso hemos diseñado esas secuencias de actuaciones donde experimentamos al máximo con las viñetas y la estructura de páginas, para intentar evocar algo que no puede ser explicado con diálogos.

Y más allá de estas actuaciones, hay muchos trucos que hay usamos en Phonogram. Por ejemplo, el número ocho de la serie está estructurado como una gran rave. Nos lo pasamos bien.

P.M.:¿Hay algún álbum o algún concierto que resuene en vuestra cabeza y que podría ser considerado una gran influencia en la serie?

K.G.: Una actuación de Robyn en Brixton fue la mayor influencia en el climax de Jóvenes Vengadores, y también funciona muy bien aquí. Puedes ser a Lucifer como Robyn en Brixton, aunque con un flitro, claro. Pero hay muchas otras cosas en el aire. Está esa sensación de los festivales de música (o de las convenciones de cómics). Esto es sobre el arte, la música, y ser un aficionado. Todo eso está volcado ahí. Todo el número siete viene de la experiencia de una convención, por ejemplo.

P.M.: Las deidades que has elegido para protagonizar WicDiv no son las más habituales. ¿Esto ha sido una decisión estratégica? ¿Qué puedes contarnos?

K.G.: Nuestro plan era mezclar dioses conocidos con algunos tirando a olvidados, pero creo que quizá fui demasiado optimista a la hora de estimar la familiaridad de los más oscuros. Sabía que usar a Baal era quizá demasiado, pero pensaba que al menos mucha gente conocería a Morrigan o Baphomet. Al menos, la primera historia está más o menos centrada en Lucifer, ya que sabíamos que sería el más conocido de todos ellos.

Pero sí, había una intención de utilizar Dioses que no estén muy trillados. No quería más de un gran Dios por panteón, aunque admito que hicimos trampas en algún momento, tratando los panteones nórdicos y germánicos por separado y teniendo distintas etapas de los Dioses griegos como de panteones distintos. Pero también queríamos Dioses de los cuales la gente no tuviera muchas ideas preconcebidas. Al menos de la ficción. Por ejemplo, consideramos a Bast para nuestro dios Egipto felino, pero decidimos en el último momento que podría estar demasiado cerca del trabajo de Neil Gaiman y que sería mejor utilizar otro. De ahí Sakhmet.

P.M.: Reencarnación cada noventa años. Muerte dos años después. Puede ser una metáfora del ciclo de la vida de los mortales y de cómo en dos años se concentran generaciones de humanos hoy en día a través de las redes sociales. Pero… ¿Por qué esos dos números? ¿Qué historia hay ahí detrás?

K.G.: En incontables historias hemos leído eso de “Cada cien años”. Yo no quería que fuera igual. Es un número demasiado redondo y yo quería otro que pudiera hacer nuestro. Así que elegí 90, que es un duración de tiempo conocida como saeculum, que viene a ser equivalente a toda una generación. Todo el mundo vivo al principio de esos noventa años estará muerto al final. Esa definición encajaba muy bien con lo que quería contar.

Respecto a los dos años, pues un poco de lo mismo. Parece que hemos leído muchas veces ya lo de “tienes un año para vivir”. Es demasiado familiar. La cifra “2” es menos habitual y me permite contar una historia con sentido, porque sigue siendo un periodo de tiempo corto sobre el que construir una historia dramática sobre la inmediatez de la muerte. Si hubiese escogido cinco años, pues la verdad es que los personajes estarían menos agobiados por su futuro inminente y costaría transmitir los sentimientos. Con dos, el reloj está contando desde el principio.

Y además tiene un detalle metatextual para mí, ya que es una serie que empecé a escribir cuando tenía 38 y empecé a tener miedo de cumplir los 40.

P.M.: Desde el punto de vista del mass media y de nuestra sociedad, a veces parece que un angel caido puede ser más rentable que un famoso estable. O una pareja divorciada más comercial que un matrimonio estable. ¿Cuál es tu visión de los ídolos modernos en este sentido?

K.G.: Pues creo que es un aspecto muy interesante como para que alguien haga una serie de cómics explorándolo [Risas].

P.M.:¿Tenéis intención de explorar otras ventanas de tiempo y reencarnaciones previas de los Dioses? Tendría mucho interés…

K.G.: Por supuestísimo. Nuestra historia comienza en 1920 y hemos hecho un especial ambientado en 1830. Y ahora va a salir otro en Estados Unidos ambientado en 455 A.C. Ya cuando empezamos la serie sabíamos que queríamos ampliar el horizonte. Todos nuestros cómics favoritos de siempre han tenido espacio para que sus creadores pudieran expandirse durante los cinco o seis años en los que están trabajando. No debes pensar en pequeñito, porque la persona que eres cuando empiezas la serie va a ser muy distinta de la que serás cuando la acabes.

Y como WicDiv nos permite hacer lo que queramos, vamos a demostrar que no es solo una serie sobre estrellas del pop. Es sobre el arte y los artistas. En el panteón de 1830, los dioses estarán inspirados por los poetas románticos. En resumidas, viajar a cada periodo temporal demostrará lo que cambia y lo que nunca cambia. Es una serie sobre el ciclo de la vida, pero que también sirve para explicar el cambio. La tensión entre ciclo y cambio es importante en la dicotomía Wicked/Divine.

P.M.: Esta serie la habéis publicado en Image. ¿Siempre teníais clara esta decisión? ¿Qué es lo mejor de publicar en Image?

K.G.: Image son héroes para nosotros. Nadie nos hubiera dejado hacer Phonogram hace casi quince años. Y ellos lo hicieron. Los consideramos nuestra casa para los trabajos más experimentales, salvajes y personales. No podríamos haberlo sacado en ningún otro lado. Y la mejor parte, pues tener el control absoluto. De todo.

P.M.: Para cuando esto se publique en España, en USA/UK ya hay cinco tomos recopilatorios publicados, así que aquí intuyo que irá rápido. ¿Qué podremos esperar de los siguientes tomos?

K.G.: Tenéis que verlo de esta forma. Tener expectativas y creer saber por dónde va a ir la serie no es lo mejor que podéis hacer. Tengo un plan intricado con una dirección, pero no es posible que lo veáis venir. Es un libro que es conocido por sus grandes sorpresas que serán de lo más lógicas cuando lo veamos en retrospectiva. Eso sí. Será glorioso. Y entretenido. Y así, todos los números hasta entonces.

P.M.: ¿Podemos saber cuántos números tendrá la serie en total? ¿Ya lo tenéis pensado?

K.G.: Creo que van a ser al final nueve tomos. Ocho tomos recopilatorios de la serie principal y uno con todos los especiales que saquemos.

P.M.: Muchas gracias por tu tiempo, Kieron. Espero que The Wicked+ The Divine triunfe en España, que llevábamos mucho tiempo esperándolo.

K.G.: Muchas gracias a vosotros.

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5 abril, 2017 21:56

«P.M.: Desde el punto de vista del mass media y de nuestra sociedad, a veces parece que un angel caido puede ser más rentable que un famoso estable. O una pareja divorciada más comercial que un matrimonio estable. ¿Cuál es tu visión de los ídolos modernos en este sentido?

K.G.: Pues creo que es un aspecto muy interesante como para que alguien haga una serie de cómics explorándolo [Risas].»

Leyendo esto y sabiendo que a Gillen le gusta mucho Milligan, no he podido evitar pensar en X-Statix.

Raúl López
Admin
5 abril, 2017 22:19

Enhorabuena por la entrevista Pedro, tiene pinta de convertirse en España uno de los mejores lanzamientos del año y me han encantado sus respuesta profundizando aun más en esa cara b q se esconde detrás de cada historia.