¿Un grupo canadiense? A priori podía parecer lo suficientemente aburrido para ni siquiera echarle un ojo. Sería ¿1985? cuando apareció el número 1 de los alfafa (así lo llamaba mi hermano). No fué el único que apareció al unísono; Iron Man también hizo su aparición en aquella época. No recuerdo bien el año, pero si el mes en el que lo compré: Marzo. Lo recuerdo porque guardé algo de dinero sobrante de mi cumpleaños y me acerqué a la librería donde nos guardaban los fascículos de Fauna y pedí los dos únicos números uno que vi. A su lado, la Patrulla X iba ya por el 3 o el 4 y no me apetecía comprar algo empezado.
El nombre del guionista y dibujante, John Byrne, no me decía nada. Es más, ni siquiera sabía pronunciarlo. Daba igual; aquel tipo sabía lo que se traía entre manos. Ante mi, se abrió un nuevo concepto de superhéroes: Vindicador (Guardían), ,Marrin a Puck, Ave Nevada, Estrella del Norte, Auora, Shaman…no era nada parecido a aquellos ¿mutantes? que leí en un pocket de ases ni a los Poderosos Vengadores.
Luego, entendí que Byrne era un Dios todopoderoso en aquella época y que morir era algo relativo (¿verdad Guardián?). Pero disfruté como nunca al ver la separación de un grupo en la primera página, la muerte del personaje principal…en definitiva, me enganché al cómic.
Hace años que no les echo un vistazo. Me quedo corto si digo diez años. Aún así, todavía recuerdo la aparición de Namor y la Mujer Invisible, los problemas psicológicos de Aurora, a Heather, a Puck…y a los Beta y Gamma Flight (creo que eran así).
¿Por qué escribo esto? Bueno, nunca está de más recordar por qué me gustan los cómics.
