Jason Aaron pone fin a su etapa al frente de Lobezno

Hace aproximadamente una década, Marvel Comics publicaba en el último número de Los Papeles de Logan, una historia corta en la que Lobezno debía ayudar a una anciana cuyo coche se había averiado mientras era perseguido por un cacique y sus esbirros. El relato había resultado premiado en una iniciativa organizada por Marvel en la que el ganador disfrutaría el honor de ver su historia publicada en la cabecera del personaje. Con un talento único para la escritura corriendo por sus venas (algo de lo que puede dar fe su vínculo familiar con Gustav Hasford), Jason Aaron encontraría de esta forma una vía de escape a la cadena de trabajos sin futuro en la que estaba atrapado. Cinco años tendría que esperar hasta ver al fin publicado su primer trabajo importante con El Otro Lado y tras ser nominado al premio Eisner deslumbraría a propios y extraños con Scalped. Viendo que se les había escapado de las manos un diamante en bruto, Marvel volvería a tentarle ofreciéndole guionizar un número autoconclusivo del canadiense del que tan ferviente seguidor era. El resultado fue El Hombre del Pozo y tras esta, su etapa en Motorista Fantasma, Lobezno Arma X y PunisherMAX. Sin nunca alejarse del todo de la serie regular del personaje con arcos como Atrapar a Mística y miniseries como Astonishing Spider-Man y Lobezno o Manifiesto de Destino, Aaron no tardaría en convertirse en el nuevo responsable de la misma con un flamante relanzamiento en el que todas las cabeceras del personaje fueron unificados en una única colección que usaría para arrastrar al personaje a los abismos del averno.

Tras desmontar al personaje con la macrohistoria Lobezno va al Infierno, Jason Aaron reestructuraría la franquicia mutante con X-Men: Cisma dando forma con Lobezno y los X-Men a una de las series de moda de la actualidad. Ahora, el guionista ha anunciado a través de una rueda de prensa organizada por Marvel Comics que con la publicación el próximo Marzo del número 300 de la colección inicia el último acto de su etapa al frente de las aventuras de Lobezno en solitario. En dicha historia, Aaron apela a los clásicos llevando a Lobezno hasta Japón para verse atrapado en una feroz guerra entre La Mano y la yakuza. Congregando a la coalición más grande de supervillanos que haya usado en su carrera, el guionista describe como su relato pretende convertir al clan japones en algo más que una secta cuyo principal modus operandi es lanzar a veinte tíos vestidos de ninja a través de las ventanas (y en caso de dar resultado, volver a probar con otros cuarenta más). Con la participación en la trama de Yukio, Amiko y un Dientes de Sable recien salido de la tumba (por la obra y gracia de Jeph «no somos dignos» Loeb) durante la misma será presentado el nuevo Samurai de Plata. Con un diseño completamente nuevo perpetrado por Steven Chambers, el hijo de Keniucho Harada tomará el legado de su padre proponiéndose a establecerse en una posición destacada dentro del hampa de Tokio. Con una actitud bastante diferente a la de su progenitor, los editores Jeanine Schafer y James Viscardi comentan como su look se aproxíma más al de un dinámico Iron Man nipón mientras bromean acerca de que aunque Harada era un gran personaje, era imposible dibujarlo sentado.

Describiendo esta trama como la más ambiciosa que haya realizado con el personaje, Aaron pretende convertir Japón en una protagonista más de la historia (no faltando las referencias al tsunami de este año, aunque de una forma tangencial para no recurrir a la «pornografía» emocional). Tras esto, el guionista pondrá fin a vinculación con las aventuras en solitario del personaje manteniéndose como responsable de Lobezno y los X-Men. Habiendo aportado más madurez y desarrollo al personaje que el conjunto de la mayor parte de sus predecesores, el guionista describe como el que Lobezno haya pasado de ser un marginado a una «figura paternal» quizás sea un reflejo de su propia trayectoria desde que era un tipo soltero sin responsabilidades que trabajaba en un almacen allá por 2001 hasta su situación actual casado y con hijos. Habiendo reinventado los grandes mitos del personaje brindándonos aportaciones como la actual pareja del canadiense Melita Garner, el uevo Deathlok o incorporaciones a la galería de villanos del personaje como el Doctor Rott, la Mano Derecha Roja o la Strikeforce X (más conocidos como los Hombres de Adamantium) queda la duda de si sucesor mantendrá la línea redentora desarrollada durante estos últimos años o lo llevará por una dirección diferente.

Sobre los posibles candidatos para sucederle a cargo de la serie, aunque Marvel no ha soltado prenda nosotros no hemos podido evitar pensar en dos «Brian». El primero, un Brian Wood quien tras haberse probado con historias de corte sucio como DMZ o Northlanders actualmente se encuentra guionizando la miniserie Alpha y Omega en el que el canadiense se enfrenta al Quentin Quire de Grant Morrison (y que podría ser su prueba de fuego antes de tomar las riendas de la colección) o el creador de Alias y la revolución de los Vengadores Brian Michael Bendis, quien ya dejó caer hace unos meses sus posibles planes para el personaje añadiendo que no tenía intención de tomar las riendas de la serie dado a que Aaron le importaba demasiado como para arrebatarle su «juguete» (ahora que Aaron deja la serie, no le quedrían motivos para no hacerse con el canadiense en sus garras. Esto nos lleva a la posibilidad de que el propio Aaron pudiera suceder a Bendis como guionista de los Nuevos Vengadores. En el pasado ya ha demostrado disfrutar guionizando a Spider-Man, Luke Cage y su señora y no se ha privado de usar argumentos fetiche del guionista de Ultimate Spider-Man como la tensión sexual entre Logan y la Chica Ardilla. Como pronto las primeras páginas de Adam Kubert para el especial número 300 lucen francamente bien mostrándonos la clase que tienen las aerolineas rumbo a Japón con reparto de katanas y aseos en los que corres peligro de morir asfixiado a manos de gases pestilentes inclusive.

Marzo nos trae además importantes cambios para la subfranquicia del personaje con la cancelación de las series de X-23 y Daken. Con un notable estado de forma gracias a la labor de Marjorie Liu y Rob Willians, en sus respectivos últimos números Laura tendrá que decidir quien quiere ser mientras que Daken se enfrenta por última vez a su padre con el fantasma de la enfermedad mortal que está consumiendo su cuerpo orbitando a su alrededor. Si la portada de Kalman Andrasofsky para la serie de la pequeña clon está bastante lograda, la de Giuseppe Camuncoli ha conseguido tocarme la fibra sensible recordándome a La Habitación del Hijo de Nanni Moretti. Por su lado, Masacre continúa buscando la Muerte en el nuevo arco de Daniel Way con la participación de los miembros de Uncanny X-Force, quienes no tienen demasiado claro si salvarle o apretar el gatillo.

Fuente: Marvel.Com